Me dirigía al colegio montada en mi bici ya q estaba muy apurada por el hecho de que tocaba examen y quería llegar más temprano para así estudiar un poco más cuando llegue a esta.
Iba mirando hacia las esquinas para poder cruzar la calle, cuando pasó un chico de cabello negro enfrente de mi, en bici también al mismo tiempo en que yo seguía mi paso, por lo q terminamos chocando y cayendo al suelo.
- Hey, niña, acaso no ves por donde vas.
- Perdón, perdón- dije recogiendo la bici y uyendo de la escena del crimen.
- Oye, a donde crees que vas- se notaba mucho lo enojado que se veía, pero de igual manera me escapé.
La verdad es que no fue mi intención, pero estaba apurada, y no podía pararme a discutir con nadie- Lo siento mucho- grité desde mi lejanía.
Me había entretenido tanto en llegar al cole que no me di cuenta de la sangre que Amenába del raspón que tampoco noté en mi rodilla.
- Tu rodilla está sangrando- me dijo Laura alarmando me.
- Joder, no me había dado cuenta de esto- dije mirando hacia la pequeña herida- seguro fue cuando me caí en la calle.
- Que te pasó?- preguntó Ana.
- solo choqué con un chico en la bici.
Sonó el timbre, lo que significaba que ya iba a comenzar el exámen, así que nos dirigimos a los salones que nos indicaron. Las chicas no quedaron en el mismo salón que yo, ya que las mandaron al salón de enfrente.
Al terminar el examen salí para el área de la cafetería, a donde me decidía merendar, y eso fue lo que hice. Tomé un jugo de manzana y comí un donut. De allí fuy a mi casa, ya que no tocaban más clases gracias al bendito examen. Cuando llegué la casa estaba totalmente desierta ya que mi madre estaba trabajando, por lo que me metí en la habitación para darme una relajante ducha y curar mi raspón. Puse los éxitos de los 80 a todo volumen, con la canción Nothing's gonna stop us now.
Me relaja mucho esa canción. Entré al baño y me dí un baño, para luego salir y vestirme con un chándal y una camiseta de AC DC.El chico de hoy en la mañana se habrá hecho daño?- no se por qué me pasó eso por la cabeza, pero no importa. Ni siquiera le vi la cara. Lo único que recuerdo son sus botas de color negro.
Me quedé dormida pensando en que mañana tendría que volver a ese nido de abejas que llamamos escuela, pero que le vamos a hacer, tengo que ir.
Hola lectores