⸺¡Atrapala hermano! ⸺exclamó Jee-Ni mientras lanzaba un balón en dirección a su hermano Geum-Jae que la atrapó con éxito⸺ ¡Bravo! ⸺exclamó feliz, para saltar e ir a los brazos del castaño.
Mientra tanto, Yoongi observaba a sus familiares convivir con euforia, observando con detenimiento sus rostros de alegría y aquellas sonrisas que tanto le gustaba ver, por que algo que le agradaba más que las mandarinas, era ver a su familia feliz. ¿Pero porque era el único que no sentía aquella emoción en su pecho? Se sentía ajeno a la ceremonia, aunque él se había mostrado reacio a ir, en el fondo sólo quería divertirse como todos.
Su resentimiento con aquellas reuniones era justamente eso, la incomodidad y la ansiedad al convivir con la gente, el hecho de que se sentía como la oveja negra de la familia a pesar de ser prácticamente un angelito entre todos sus escandalosos hermanos. Sentía que no tenía nada en especial comparados a sus hermanos y progenitores que destacaban entre la manada, no era interesante para las personas o algo que les llamara la atención.
Aunque no era excluido en sí como para que le dejasen de hablar, la gente lo ignoraba por que lo consideraban un lobo extraño, tal vez como un alfa defectuoso por su actitud pasiva y sus cero ganas de ser un guerrero como los otros alfas, callado y con aquella mirada rasgada que sentías que te miraba hasta lo más profundo de tu ser.
Y Yoongi estaba muy consciente de lo que pensaba su gente de él, pero solo se resignó encasillarse en el personaje que fue escrito para él y vivir su vida tranquilo conformándose en ser el alfa callado y sin amigos. Pero en algun punto de su vida se preguntaba si algún momento las cosas podían cambiar y podría comenzar a vivir como los otros muchachos de su edad, que tenían amigos y salían a jugar paseando por el bosque, teniendo habilidades destacables y buen desenvolvimiento social, siendo amado por todos.
El pálido sólo suspiro cerrando sus ojos mientras entrelaza a sus manos, sintiendo como su rostro era iluminado por la luna que brillaba con intensidad y era suavemente acariciado por las brisas del viento, disfruto aquella sensación ignorando por completo el ruido que lo envolvía, hasta que abrió lentamente sus ojos y vio como sus padres por fin se reunían con los consejeros oficiales, aquellos que manejaban partes cruciales de la manada para una buena gestión de su pueblo.
Coloco sus ojos en blanco, recordando las palabras de su padre advirtiéndole que pasaría toda la noche junto con ellos atendiendo a los consejeros y familias importantes de su manada, intuyo que pronto sería llamado para estar ahí escuchando todo. El solo imaginar la idea ya era tedioso para su trasero flojo que sólo quería irse a casa, asi que sin pensarlo mucho retiro su gat dejándolo en una de las mesas, para irse al bosque sabiendo que pasaba desapercibido.
Se adentro a paso lento al bosque sintiéndose confiado pues era parte del territorio Min y conociendo cada parte de el gracias a su padre, que había entrenado sin excepción a cada uno de los hermanos para conocer cómo la palma de su mano su pueblo y sus alrededores. El pálido suspiro mirando sus alrededores sin mucho interés, mientras estiraba su cuerpo sin mucho ánimo, otro pequeño suspiro salió de sus finos labios que sonrieron ante la idea que surgió de su cabeza.
Hace tiempo que no salía a pasear en su forma lobuna, ya que siempre el bosque estaba infestado de personas haciendo guardia y parejas haciendo de las suyas a escondidas, que era algo desagradable para el oji-gris. Sin pensarlo mucho tomo su forma animal, aquel lobo sin duda era majestuoso, no era tan grande como sus hermanos, pero era considerablemente intimindante, su pelaje sedoso y perfectamente cuidado de un color rubio cenizo igual que sus mechones de cabello que tenía en su forma humana, Yoongi movió la cola feliz mientras se estiraba un poco más para comenzar a correr, disfrutando del aire puro que chocaba en su rostro.
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𝐓𝐇𝐎𝐒𝐄 𝐄𝐘𝐄𝐒 「𝐌𝐈𝐍 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐆𝐈 𝐗 𝐋𝐄𝐂𝐓𝐎𝐑𝐀」
FanfictionYoongi no era de aquellos que creía en el amor o aquel famoso mito sobre "La pareja predestinada" creía que era incluso ridículo. No hasta que un día sus ojos oscuros como el carbón se encontraron con aquellos ojos como el fuego que brillaban intens...