Profesor - KiriBaku

Profesor

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Katsuki era un nuevo profesor en la escuela, llamaba bastante la atención de los alumnos por la ropa "llamativa", según otros profesores, que llevaba y su gran busto. Y no sólo eso, era joven. Acababa de terminar su carrera y obtuvo un trabajo en un pequeño pueblo.

Los primeros días fueron tranquilos, muchas miradas por allá y muchas por acá. Pero no había nada que llamara su atención. Se estaba aburriendo en ese pueblucho. O al menos eso pensaba hasta cierto día, déjenme explicarles lo que pasó. Un día miércoles un alumno que no conocía Bakugou se presentó al salón, no era ningún alumno nuevo ni nada, era simplemente uno que había faltado por problemas de salud. Así que cuando llegó no pudo evitar llamar la atención del profesor, no es porque sea la persona más atractiva del lugar, si no todo lo contrario. Era un chico de estatura promedio, tenía cabello negro que lucía grasoso, como si no se hubiese bañado en un tiempo. Veía como su camisa escolar estaba empapada de sudor y su postura mostraba inseguridad. Era una imagen completamente repugnante y poco atractiva, pero cuando Bakugou lo vio no pudo evitar sentirse excitado; su mente pensó en mil maneras en la que podía tener a ese mocoso bajo sus pies, metiéndole la, seguramente pequeña y asquerosa, polla en su culo hambriento. Hasta podía jurar que casi tenía una erección.

El chico se llamaba Kirishima Eijiro, era un joven bastante nervioso y adorable con dientes puntiagudos que parecía tener un gusto curioso por las cosas frikis cómo cómics y series animadas de los 70's. Eso era obvio por sus materiales escolares y su ropa, que solía tener diseños de estos. Y eso sólo le confirmó que era un virgen hecho y derecho. Supo identificar su presa.

Inmediatamente empezó a darle coqueteos simples y atrevidos, tales como hablarle sensualmente en el oído y poner su pecho cerca de la cara de Kirishima con la excusa de ayudarlo con su tarea. El adolescente intentaba disimular que no veía su escote pero fallaba rotundamente, dios, era tan gay. El niño básicamente tenía una flecha homosexual apuntandolo.

Pasaron varias semanas así y Katsuki sintió que ya era el momento de pasar a algo nuevo. Empezó a llamar al chico a "Clases extras" o le decía que se quedaría después de clases para discutir algunos temas. Esas pequeñas reuniones eran más atrevidas y tenía que aceptarlo, ya que no tenían a nadie a su alrededor. Sólo ellos dos.

Este día era tiempo de "Clases extras", Kirishima estaba sentado en su pupitre mientras escribía en su libreta de Red Riot, por otra parte Bakugou estaba sentado frente a él, mirándolo fijamente. El menor intentaba terminar un ejercicio pero se detenía seguido al sentir la mirada fija de su profesor.

-¿Está bi-bien así, profesor?- le pregunto Eijiro.

Katsuki se recostó sobre el pupitre con toda la intención de mostrar su escote y sabía perfectamente que el pelinegro iba a ver.

-No, te equivocaste- dijo tomando la mano del menor y apropiándose de su bolígrafo -Aquí está mal...- se acercó a su oído -Resuélvelo otra vez.

Eijiro rápidamente asintió y volvió a lo suyo, más nervioso que nunca. Bakugou sin temor se sentó al lado del menor y empezó a acariciar su muslo. Bajando su mano hasta la rodilla y subiendola cerca de la pelvis. Sentía al menor estremecerse con sus toques y no pudo evitar sonreír con malicia.

Decidió tomar un camino más arriesgado y soplar la oreja de su alumno. Este en respuesta soltó un gemido patético, Bakugou no se detuvo. Sus labios empezaron a pasar de su oreja hasta su mejilla; el chico mantenía su mirada en la libreta mientras sentía sus manos temblorosas sudar.

Muy impaciente, el rubio cenizo tomó de la barbilla al otro y le dió un beso en los labios. El mejor se quedó de piedra por un instante antes de intentar seguirle el beso a su profesor.