Esa mirada esmeralda era su debilidad, desde el momento que lo conoció sabía que sería su perdición. Había anhelado tanto que esos ojos lo mirarán con algo más que "odio".
Las burlas y las peleas eran tan solo la forma de llamar su atención, no es que odiara a Potter o a sus amigos, tan solo quería ser especial como lo eran ellos… Quería ser especial para Harry, tal vez una amigo o quizás un buen compañero.
Pero no su enemigo.
Sus pensamientos viajaban de una idea a otra, hasta que su concentración se vio interrumpida por un sin fin de murmullos a su alrededor. Por instinto giro su rostro y sus ojos plata se posaron en aquella mirada esmeralda que tanto deseaba.
Harry lo miraba intensamente, una mirada que el rubio no supo descifrar.
La respiración de la serpiente se cortó por breves segundos, pero no quería apartar la vista… Harry lo estaba mirando.
A partir de ese momento Harry buscaba con mayor insistencia la mirada de Draco y este siempre le correspondía con la misma intensidad.
Parecía un juego inocente, miradas discretas acompañadas de sonrisas.
¿Qué buscaba el Gryffindor al mirarlo de aquella manera?
No lo sabía, pero si era una broma quería perderse en la más absurda de las mentiras.
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Miradas que matan
Fanfiction¿Y qué si tenía que recurrir a lo más bajo para mantenerlo a su lado? El amor era así, capaz de sacar lo peor de uno mismo y Harry lo sabía... El amor podía ser ridículamente obsesivo.
