Despertó, se sentía adolorido y con la vista borrosa trato de observar a su alrededor, dos sillas, una mesa con objetos desconocidos que parecían filosos, cadenas y muchas, muchas cajas tiradas....
Hacia frío, demasiado, pero por alguna razón su interior se sentía caliente.... ¿Porque?
El rechinar de la puerta lo sacó de sus pensamientos, comenzando inmediatamente a temblar, escuchaba pasos cada vez más cerca de él, cerro los ojos y trato de no llorar, no sabía el porque estaba ahí, tal vez por desobediente....
¿Estaba pagando por eso?
Su madre le había dicho que la desobediencia tiene un precio y que hay que pagarlo, para así, aprender una lección...