Primavera | Komi-san wa, Komyushou Desu

ú n i c o

Shousuke se encontraba sentado en un sillón individual, mientras leía un libro, aunque solamente miraba la página y la pasaba, hacía un buen rato de que no le estaba prestando atención a su lectura.

No supo en qué momento, se detuvo a ver con detenimiento su anillo de casado, porque sí; El chico que alguna vez fue el más cotizado del Kisai High School: se había casado.

Era una noticia que a más de una chica le sorprendería; ¿Quien fue esa persona que cautivo a Komi Shousuke? pues, fue la chica de las dos coletas. Tadano Hitomi: y aunque varios les parecía raro y confuso: así pasó.

Durante toda su época de preparatoria se convenció, de que lo único que quería era que Hitomi lo dejase en paz, muchas veces anheló con recuperar esa vida de soledad que tenía antes de conocer a la muchacha.

Pero cada día que pasaban cercanos, descubría lo mucho que de verdad; quería estar lejos de la Tadano. No podía, se había convertido en una rutina y descubría muchas cosas de ella.

En ese momento pensaba de que Hitomi era igual a la primavera:

Tenía una energía tan positiva que parecía nacer flores de ella, posseia una sonrisa tan bonita cómo el clima primaveral, era imposible que la puedas evitar, era como evitar el sol prácticamente; Además de ser querida y admirada por algunos.

Pensándolo mejor, la primavera no era la estación favorita de el Komi, eso estaba claro como el agua, porque lo era el invierno.

Eso a él, no le importaba mucho. tal vez no le gustaba la primavera, el tener que socializar con gente, los lugares con demasiado ruido o que incluso no le respetaran su espacio personal.

Sin embargo; estaba enamorado de Hitomi, una chica que en esos años, hablaba hasta por los codos, que le proponía interactuar con personas, organizando eventos (donde la mayoría el ruido era un problema) para que él supere ese trastorno comunicativo, lo que ella creía que tenía.

— ¡Estoy en casa! — Anuncio la mujer de cabello azabache, logrando sacar de sus pensamientos al Komi. quién dejó de ver el anillo y volvió a retomar la lectura.

Hitomi camino hacia su esposo, mientras que él todavía fingía leer una página del libro. cuando su esposa se acercó, la miro y ella le sonrió.

— ¿Todo bien? — él asintió con la cabeza. mientras ella se sentaba en las piernas del hombre y acomodaba las suyas en el apoya brazos del sillón con toda la confianza del mundo — ¿Que lees? mí amor — preguntó mientras lo abrazaba un poco.

El peli-violeta se puso nervioso y lo único que pudo hacer fue cerrar el libro para que ella vea el título.

Hitomi tampoco respetaba su espacio personal; no obstante, el tenerla tan cerca lo hizo oler un poco de su perfume floral, también recordó el día que se casaron.

Ese día donde Komi Hitomi; estaba floreciendo miles de primaveras en el corazón de él, con su hermosa sonrisa brillante.
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