III

38 7 0
                                    


Todas las noches salía para no pensar en ella y en su recuerdo... Ese hermoso recuerdo que tanto me atormentaba.

Me dirigí nuevamente al bar. Seguramente para terminar borracho, como de costumbre.

Y ahí la vi. Estaba sentada a un lado riéndose y divirtiéndose como si alguna vez esto que había entre nosotros nunca habría pasado, a lo mejor ya se había olvidado de mi...

Me acerque e indirectamente la besé pero algo raro pasaba, no era ella, solo se parecía.

La sujete de los hombros y susurré:
Por favor, -¿Puedo llamarte por su nombre?.

Encontrarla en ese bar me afecto, no valía la pena. Decidí volver a casa.

El aroma de su perfume se sentía en aquel auto. Me dije a mi mismo "era como que estaba, realmente la buscaba, pero no estaba".

¿Puedo llamarte por su nombre?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora