FALLING FROM THE STARS, rhysand & feyre archeron [español]

III. Hollow Ground

"Suelo Hueco"

Mientras caminaba por los salones vacíos, pensó que vio a la gente por el rabillo de su ojo, pero cuando miraba, nadie estaba allí. Deseó que ella tuviera una estela. La mansión era hermosa, pero era una ciudad fantasma. Cada puerta se veía igual. Mientras estaba afuera de una puerta reflexionando si debería llamar, y simplemente, espero que fuera la puerta de Feyre.

Las puertas talladas de madera se alineaban a las paredes, cada una parecía un poco diferente si miras fijamente, pero Lorna todavía no podía decir cuál era. Alis le dijo la puerta al final del pasillo, pero ¿cuál? Esa fue la cuestión de la noche.

Lorna decidió que lo peor que podría pasar era que sea golpeada en la garganta. Realmente, ¿podría algo ser tan malo ser secuestrado por Sebastian Morgenstern? Ella no piensa. Un momento después de llamar, una niña contesta la puerta. Su suave cabello castaño estaba metido detrás de su oreja, revelando orejas curvas.

—Oye— dice Lorna.

Lamenta llamar. Debería estar buscando un camino a casa.

—¿Hola?— Feyre pregunta.

Sus ojos se suavizan cuando se da cuenta de que es un mortal. Abre la puerta, dejando entrar a Lorna. Su habitación era casi idéntica a la de ella, al lado de algunos cambios en la decoración. Los ojos de la cazadora parpadearon sobre su rostro, la sensación de familiaridad llenando su pecho como el calor.

Las palabras mueren en su garganta.

—No sé lo que estaba pensando venir aquí—dijo Lorna —Debería irme.— se vuelve para irse.

—Espera— dice Feyre. Lorna se da vuelta.

—¿Tienes glamur?— Feyre pregunta —¿Eres una faerie? —Ella quiere decir.

—No. Soy un mundano— responde Lorna.

—¿Un qué?— Las cejas de Feyre están fruncidas.

—Mortal. Me refería a Mortal—no sabía  por qué lo sentía como un puñetazo en el estómago.

—¿Necesitabas algo?— Feyre pregunta.

Lorna se encoge de hombros—Bueno, considerando que eres el único otro mortal ...— figura que el resto de la conversación es auto explicativo.

—Sí — está de acuerdo.

Lorna no dice: Estoy solitaria y asustada. Por favor acepta. A su vez, Feyre no dice: Quiero irme a casa. Mi familia me necesita.

Una cosa es segura, Lorna y Feyre no quieren nada más que irse a casa.

No pudo evitar la ira que amenazaba con explotar. ¿Qué había hecho para merecer esto? ¡Simon la necesitaba y ella estaba atrapada aquí! Después de la guerra, Lorna hizo planes. Ella se dijo a sí misma que viviría el resto de su vida cumpliendo las cosas que quería hacer. ¿Ahora? Era un sueño demasiado lejos a menos que ella lograra encontrar su camino a casa.

Se sujetó sobre su labio, forzando la necesidad de gritar. Miró a Feyre; casi esperando que se transformara en Clary.

El sol brillaba a través de la ventana. Enmarcó su cabello, sus pómulos, pecas y su silueta. Una punzada de simpatía pasó por su pecho cuando vio lo frágil y delgada que ella era. Todo estaba mal.

—¿Podemos terminar esta conversación más tarde?— pregunta, girando sus talones antes de que Feyre pueda responder.

Sabe que estaba jodida muchas maneras. Difícilmente podría ser considerada una hija decente o una hermana buena. Si tuvieras que pasar por su historia, ¡podría no haber sido una buena amiga, pero ¿Lorna jode lo suficiente como para terminar aquí?

Por primera vez, Lorna maldijo a Raziel.

(:)(:)(:)(:)

Lorna se esconde detrás del grande armario, aplastada entre la pared y la madera fresca. Ella no se esconde de las hadas de abajo, sino, más bien, de la verdad. La verdad lo espera en la planta baja. Aquí aquí, ella puede esconderse un poco más.

—Por favor— murmura —Dime qué hacer—  no cree que ella haya estado tan perdida antes. Tan absolutamente sin respuestas. Otras veces, incluso cuando Lorna se sintió jodidamente desesperada, tenía a Clary y Simon.

Con un respiro profundo, Lorna se encuentra, agarra su cuchillo de la mesa y se mueve hacia la ventana. Está abierta, se da cuenta. Tamlin no dijo que ella era prisionera pero ¿honestamente? No quería pasar por encima de ellos. No confía en ellos. Piensa que preferiría morir que pasar por los encuentros incómodos, ya que evaden la verdad. Ella terminó aquí. Tenía que haber una manera de volver a casa. No quería responder a sus preguntas sobre quién era ella. Lorna ni siquiera sabía quién era ella.

Abre la ventana, se desliza las piernas sobre la cornisa y los salta. Momentáneamente, ella se siente con doce otra vez. No pienses en eso. Fracturaste tu pie esa vez.

Aterrizó con un ruido suave.

Piensa que escucha un zumbido leve. Las moscas, probablemente.

Se obliga a no pensarlo cuando comienza a caminar hacia el bosque. Ella encontraría un camino a casa.

(:)(:)(:)

Tercer capítulo traducido listo.

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