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Narra Riddle

Suspiré profundamente, estaba enojado y triste, pero a la vez estaba nervioso y emocionado, por fin, hoy a las 10 de la noche conoceria a ese imbecil.

—¿Todo en orden, Riddle?.- Pregunto Trey.

—Oh, por supuesto.- Respondí con una sonrisa.

—Estos días has estado demasiado distraído, ¿Tiene algo que ver con aquel chico?.- Pregunto.

—No voy a mentirte, siento algo por el, se que suena algo sumamente estúpido, pero, no lo sé.

—Riddle, ten mucho cuidado, te lo digo como amigo.- Me miro a los ojos.— No sabes quién es, no sabemos que intensiones tiene, las personas son malas.

—Lo se, sin embargo, tengo una conexión grande ¿Sabes?, Es como si ya lo conociera desdé hace mucho tiempo.- Sonreí.— No te preocupes Trey, estaré bien, confía en mí.

Trey solo negó con la cabeza y sonrió, me empezó a platicar sobre su relación amorosa con Jade, es lindo ver a mi amigo enamorado, aunque, ambos se ven bien juntos, digamos que son tal para cual.

Llegue a mi dormitorio y fui directo a cambiarme de ropa, eran las 9:23 p.m. aún tenía algo de tiempo para terminar unos deberes, sin darme cuenta, ya eran 10:12 p.m.
Mi celular vibro y era un mensaje del idiota.

El Idiota ❤️

¿Me dejaras mal?.
[10:12 p.m.]

No, tuve un atrasado,
disculpa, voy para allá.
[10:13 p.m.]

No te preocupes,
estoy caminando hacia heartslabyul,
el jardín está ocupado jaja.
[10:13 p.m.]

¿Que?.
[10:14 p.m.]

Mejor te espero en la sala de los espejos,
de ahí, nos vamos a otros lugar y ya se dónde.
[10:15 p.m.]

Solo lo deje en visto y como pude salí corriendo hacia la sala de lo espejos, respire hondo mientras cerraba mis ojos y atravesé el espejo de heartslabyul, abrí mis ojos para encontrarme a nadie, todo estaba en silencio, hasta que escucho a alguien silbar una canción, rápidamente busque hasta encontrarme con unos ojos bicolor, me asuste un poco, pero, tome el valor de acercarme.

—¿Por qué te escondes?.- Pregunté.

—No me escondo, me gusta observar desde lejos.- Dijo.

Esa voz, esa maldita voz, la reconocía perfectamente, mi corazón empezó acelerarse y aquel sujeto comenzó a caminar hacia a mi, Floyd Leech, maldito momento el cual me tengo que cruzar con el.

—¿Que haces por aquí?.- Preguntó.

—Y a ti que te importa.- Respondí.

—Pecesito dorado.- Hablo.— ¿Quieres dar un paseo?.

—Espero a una persona, lo siento.

—Esa persona no va a llegar pecesito, vamos, te explicaré lo que pasó.- Dijo para abrazarme por el cuello y caminar junto con el.

—¿Que hiciste Floyd?.- Pregunté.

—Larga historia, cariño.

Cariño, esa palabra era la que usaba el acosador, me asuste un poco, ya que conociendo la personalidad de Floyd, es capaz de hacer cosas horrendas, salimos de la sala de los espejos y caminamos hacia la calle principal de la escuela, en todo el camino era un silencio algo incómodo para mí, aunque el, continuaba silbando una canción, cuando llegamos, el me hizo sentarme en una banca mientras el se sentaba frente de mi en el suelo, Floyd suspiro profundamente y empezó a jugar con sus manos.

𝑽𝒊𝒐𝒍𝒆𝒕𝒂 [RiddlexFloyd]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora