𝙒𝙝𝙤 𝙄𝙨 𝙎𝙝𝙚 [𝙏𝙤𝙣𝙤𝙬𝙖𝙧𝙞]

The Reefs.

Los días transcurrieron muy rápido desde la llegada de Robin Mcavoy a Awa'atlu, así un mes se acercaba a su fin y no había señales de sus compañeros, en todo momento le pedía a Eywa que ayudará a sus colegas en su búsqueda para que no se olvidarán de ella, pues estar en un lugar desconocido totalmente para ella le resultaba incómodo.

Todos los días la rubia salía del mauri para ayudar a las mujeres a recolectar algunas cosas que serían de utilidad, también ayudaba en la caza de los peces pues esto es una labor que se le daba muy bien. No podía montar un Ilu porque no podía establecer una conexiones con él o con alguna otra criatura marina, aún así esto no desvanecía sus ánimos, pues siempre encontraba la forma de arreglárselas para lograr su objetivo.

——Planta color verde con tonalidades rosadas muy tenues, sirve para desinflamar y calmar el dolor—escribia con mucho detalle cada una de esas palabras en una especie de libreta que había elaborado desde el primer día de su estadía en los arrecifes. Era extraño pero podría jurar que a escuchado una voz que le susurra todo tipo de información, aunque no podría decirle a nadie o la darían por loca—llevare un poco de esto podría servirme—tomo unas cuantas ojas y las guardo en un frasco—perfecto—lo guardo en su bolsa y siguió con su debido camino.

——Es tan extraña, debería de irse de este lugar al cual no es bienvenida—este comentario susurrado salió de la boca de uno de los jovenes guerreros metkayina que estaban a un paso de convertirse en adultos, pero Robin no les dió importancia alguna, pues eran unos niños que no entendían la mayor parte de la vida.

Vio como dos pequeños corrían en modo de juego jalando sus colas y dando leves empujones el uno al otro, sobre un pequeño montículo de piedras lisas que se encontraban al borde de las aguas del arrecife. En un momento repentino uno de ellos resbaló golpeando su cabeza con una de esas rocas y calló al agua.

——No puede ser.

Robin susurro esto y rápidamente fue a socorrer a ese pequeño metkayina, ya que se encontraba pasando por el lugar. Se lanzó al agua y tomo al pequeño con mucho cuidado de uno de sus brazos para después cargarlo con sutileza y llevarlo a las orillas de los arrecifes.

——!Ao'nung, Ao'nung!—la pequeña metkayina tenía sus ojos cristalinos y se mostraba muy preocupada por aquel niño—!hermano despierta!

Robin levanto una de sus manos y la colocó en la espalda ajena dando leve palmadas para intentar calmarla, mientras revisaba el cuerpo del pequeño para asegurarse de que no tuviera heridas graves. Solo encontro algunas raspaduras y una ligera apertura en su frente.

——!Humana ven conmigo!—le indico que la siguiera rápidamente—!debemos llevarlo a casa, tenemos muchas cosas para sanar su herida, por favor ayúdeme!—la desespera crecía en la pequeña que rompia en llanto al ver a su hermano en ese estado.

Robin sintió como su corazón se quebraba al ver a esa pequeña de ese modo y al pequeño, pero no entendía el porque aún así esto era lo último que le importaba, concer el porque de eso. Coloco una de las hojas que había recogido y las colocó en la zona de la frente pues se veía inflamada para luego levántese y cargar con mucho cuidado al pequeño que llevaba en brazos, era curioso lo cargaba cómo lo mas preciado en su vida y jamás había tenido algún bebé con el cual practicar eso, simplemente le salía a lo natural.

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MÁS ALLÁ DE LOS ARRECIFES
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Él Olo'eyktan Tonowari se encontraba con dos de sus fieles guerreros en las aguas profundas más allá de las rocas tres hermanos, pues hace poco notaron la precencia de un Akula y el líder se enfrentó a este feroz animal obteniendo así unos cuantos pares de dientes del animal.