you are my cardigan

Beacon hills

Según mi madre esto iba a resolver nuestros problemas, iba a mejorarlo todo, realmente espero que así sea, ya no aguanto el lugar en el que estamos viviendo.
Ahora mismo estoy viajando a Beacon Hills, un lugar donde mi madre y sus amigos solían vivir y con su novio también, Stiles Stilinski, o mas conocido como "el gran amor de su vida", mi madre siempre lo amo y creo que una parte de ella lo sigue amando.
Yo lo conozco, mamá y el se separaron por un tiempo, en ese tiempo ella conoció a papá, luego papá al saber que mama estaba embarazada de mi nos abandono, lo típico, después de eso mamá volvió con Stiles y me criaron juntos, fui como su hija y el como mi padre. Actualmente no se donde esta el, creo que fue por eso que terminaron, supuestamente el le termino porque debía irse a trabajar más lejos por lo del FBI pero si soy sincera yo no creo que eso haya sido la razón por la que terminaron, para mi fue algo mas. Me dolió? Si y mucho, no es normal que a una niña de catorce años la abandonen sus dos padres o se vayan, pero no importa, tengo a mi mama y es lo único que realmente necesito.

-Tienes todo?- pregunto mamá, ella estaba realmente nerviosa por irse casi como si le asustara

-Si- le dedique una sonrisa pero no pareció calmarla - Estas bien?

-Si, solo es raro volver allí- dijo mi madre- Con todos mis amigos, con la manada- sonrió, mi madre siempre llamaba así a sus amigos, era entendible, la mayoría eran hombres lobos, mi madre era una banshee, ella me lo explicó desde chica pero aun así yo apenas lo entendía, yo no era nada, era humana, según mi madre llevaba tiempo y practica ser banshee, yo solo no me sentía especial pero tampoco era que me molestara mucho serlo, no se me daba bien eso de salvar al mundo y bla bla bla.

Tardamos unas horas en llegar allí, el viaje no fue tan divertido ya que mi madre no hablo en todo el trayecto por sus nervios. Al llegar lo primero que hicimos fue ir a una especie de bosque, si soy sincera no entendí el porque íbamos ahí en ves de a un hotel o departamento aunque sea. Bajamos del auto y mi madre corrió a abrazar a un señor de su misma edad, yo solo me quedé mirándolos apoyada en el auto.

-Scott!, ella es mi hija- me miro a mi y sonrío- Valerie Martin

-Hola- moví la cabeza en modo de saludo desde mi lugar

-Hola Valerie, es un placer conocerte- me quedo mirando un rato para luego susurrar- Es igual a ti

-Lo se- rio y empezaron a hablar de cosas que apenas distinguí pero sabia que eran de mi

-Si los estoy escuchando- mentí para que pararan y luego de que los dos me lanzaran una mirada de aprobación dejaron de hablar.

Luego de eso mamá me pidió que vaya al auto, y me quedara ahí, que ella ya iría. Sabia que mamá me estaba estado ocultando algo que tarde o temprano me iba a enterar, tampoco era que me molestara no saber, en parte si y en parte no porque como dije yo no soy una heroína.

Minutos después mamá entró al auto, me dijo que me iba a llevar a ver mi nueva escuela aunque ni ella ni yo sabíamos el tiempo de nuestra estadía ahí, luego de dejarme a mi ella se iría a casa de Scott.

Al entrar la escuela, vi que era mucho más grande que la de mi anterior pueblo, aunque realmente no sabía si íbamos a mudarnos o no, pero me gustaba el ambiente aquí. En lo que mamá hablaba con la directora yo recorrí la escuela.

-Hola!- me sonrió un chico- No te vi nunca por aquí

-Sera porque es la primera vez que estoy aquí?

-Mi consejo como alguien que vive aquí desde siempre, es que es mejor que corras- susurro- No quieres estar en Beacon Hills- Yo me reí muy a mi pesar y el río conmigo- Soy Eli por cierto, Eli hale.