Giving To Me °WangXian°

01

Wei Wuxian no estaba seguro sobre si quería el divorcio.

Amaba a su esposo, era su mundo. Lan Wangji era todo lo que una mujer o doncel podría desear como esposo. O eso creía. Empezaba a creer que era un pésimo juez de carácter.

El problema no era si ya no sentía nada por su esposo o si él no le hacía feliz.

El problema era que la manera de amar de su amado Lan no siempre lo hacía sentir bien.

-Wei Ying -le escuchó por la bocina del teléfono- lamento molestarte, amor ¿Podrías traerme los papeles que dejé sobre mi escritorio? Los olvidé hoy al salir con prisa

-No te preocupes Gege, iré a dejártelos

-Gracias, te veo después entonces

Y la llamada terminó. Suspirando, dejó lo que estaba haciendo y camino al despacho de su esposo, recogió el folder manila y camino a la cochera por el auto.

No solía ir al trabajo de su esposo, a Lan Wangji no solía gustarle que fuera, según él, habían muchos hombres solteros y mirones.

Wei Ying bajó su mirada por instinto a su escote, procurando que fuera lo suficientemente formal para no enfadar a su esposo.

Cuando llegó, habló en el recibidor para pedir autorización para subir, la secretaria del primer piso ya lo conocía, así que le concedió el ingreso, subió al elevador y esperó a llegar al piso en donde su esposo laboraba.

Cuando salió del elevador, saludo a la secretaria de presidencia —que solo rodó los ojos molesta— y tocó la puerta de la oficina de su esposo.

-Adelante -le escuchó hablar, su profunda voz haciéndole temblar las piernas-

-Esposo -saludo entrando- te traje los documentos que pediste

-Ah, Wei Ying -saludó poniéndose de pie y caminando hacia él, lo tomó de la cintura y lo acercó a su cuerpo para besar sus labios- gracias -murmuró sobre su boca-

-No hay problema -sonrió feliz, amaba ayudar a su pareja- ¿Necesitas algo más o me retiro?

-Estoy por terminar, tengo hora libre, quédate a comer conmigo hoy

-¿Oh? Seguro -murmuró confundido, su esposo no solía dejarlo estar mucho tiempo-

-Iré a dejar esto -agitó levemente los documentos que había llevado- prepara la comida ¿Si? -besó su nariz castamente y salió de la habitación-

Suspirando feliz, empezó a desempacar toda la comida que le había preparado en la mañana, un rato después escuchó la puerta abrirse.

-Er-Gege ¿Lo sabías? Jiang Cheng dice que Nie Huaisang ¿Lo recuerdas? El del abanico, llamó anoche y...

-¡Oh, lo siento! -escuchó una voz masculina diferente a la de su esposo hablarle- no sabía que el jefe tenía visitas

Nervioso, giró sobre sus pies y observó al joven frente a él, a su esposo no le gustaría nada encontrarlos solos en el mismo espacio.

-A-ah si... Salió a dejar unos papeles, puede regresar después

-Si, claro -sonrió, más algo le dio un escalofrío dentro de su pecho, una mala sensación de incomodidad- ¿Y tu quién eres preciosura? ¿De pronto el jefe acepto tener ligues?

Su rostro se sintió arder, no sabía si de vergüenza o de enojo.

-Mi es...

-¿Qué haces aquí? -escuchó a su esposo hablar, con la voz dura y el rostro indiferente, pero la mirada ardiente en enojo-