Las primera semana paso sin inconvenientes, kara ya tenia una rutina, las mañanas las pasaba en casa o acompañando a Lena en las compras o a casa de sus padres miemtras que algunas tarde la pasaba con su hermana Alex y Mike, quienes le mostraban lugares o iban a un bar a platicar sobre anecdotas que le permitieran a la rubia recordar, para nuevamente llegar a casa con su familia para cenar y jugar con sus hijos.
La cercania entre kara y Lena era mas como un par de adolcentes que se acaban de conocer y que gustaban de cada una pero sin atreverse a dar el primer paso. Kara moria por robarle un beso a Lena, por que si, desde que la vio por primera vez sintio un flechazo y despues de que descubrio que era la dueña de aquellos ojos verdes que habia estado soñando, la rubia habia tenido sueños humedos con su esposa, por lo que se avergonzaba y aveces no podia mirar a la pelinegra a la cara.
Lena esperaba lo mismo, un simple beso, sin embargo esta ultima queria darle espacio a kara y que la recordara, por lo que se propuso hacer lo que Sam le aconsejo, todas la mañanas Lena se levantaba temprano para preparar el desayuno a sus tres amores, y es que para llegar al corazón de rubia, Lena sabia que debia empezar por.su estomago, los cuatro se sentaban a la mesa, kara ponia especial atencion a sus pequeños que no paraban de hablar y eso traia nostalgia a la pelinegra.
- ¿Y como van las salidas con Alex y Mike? - pregunto Lena a la rubia queriendo llamar su atención.
- Oh, muy bien, hemos recorrido algunos lugares que al parecer soliamos frecuentar y platicamos mucho de nuestra infancia-contesto la rubia.
-¿has logrado recordar algo?
- Realmente no, pero tengo algunas lagunas mentales, lo cual el doctor palmer dijo que seria normal, ya que mi cerebro busca una manera de despertar por asi decirlo.
Lena solo asintio-¿ iras esta tarde con ellos? - No es que a la pelinegra le enojara que la rubia pasara las tardes con su hermana y amigo pero si queria volver a conquistar a su rubia tenia que pasar el mayor tiempo posible con ella.
- No, estaran ocupados en la base, asi que me quedare en casa, creo que are trabajo forzado- Rio la rubia-El techo de nuestro covertizo necesita reparación-Dijo sin pensar.
La pelinegra sonrio tiernamente, sonrisa que porsupuesto descoloco a la rubia- Dijiste nuestro - kara comprendio entonces.
-Yo lo siento .. solo ..- Tartamudio la ojiazul
- Esta bien...cariño...me gusta que vuelvas a sentir las cosas como tuyo, por que es asi- La pelinegra le tomo la mano y la rubia sintio su cuerpo arder ante ese toque.
La mañana paso sin inconvenientes, llevada la tarde Lena llamo a su esposa a comer, su trabajo en el covertizo a un no terminaba, pese a que se llevo a sus hijos para ayudarla o mas bien para entretenerlo, esa acción creo un déjà vu tanto en kara como Lena, despues de terminar la pelinegra recogio todo y se encargo de la cocina, mientras su esposa regresaba a su trabajo, unos minutos despues, la rubia entro buscando algunas cosas, La pelinegra observaba cada movimientos de la rubia, kara abria los cajones y sacaba algunas cosas de ellos como si supiera donde quedaba todo.
-Cariño, has visto los clavos.... oh aqui estan - la rubia habia dicho eso inconcientemente, estaba tan concentrada que no se percato que su mente habia liberado ciertos recuerdos que no pasaron desapercividos para la ojiverde.
Ese simple palabra, dejo a la pelinegra estatica, cuando la rubia volteo a ver a Lena, la encontro mirandola fijamente.
- ¿pasa algo Len..? - Kara fue interrumpida, los labios de Lena se encontraban junto a los suyos, no supo cuando o en que momento, pero se dejo llevar, correspondio al beso y por dios fue la gloria, se separaron un instante con la respiraciones agitadas, juntaron su frentes.
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"Regresa a mi" (Supercorp Gip)
RandomLa segunda guerra mundial es inevitable, La piloto Kara Danver y su hermana son asignada a dirigir el pelotón Aereo de EUA contra los nazis, ¿ lograra sobrevivir a los horrores de la guerra y a las dificultades en su matrimonio? y sobre todo ¿log...
