No hay historias eternas solo momentos irrepetibles y efímeros, sin importar el lugar a donde mis pasos me guíen, la inmarcesibilidad de tus recuerdos estarán enraizados en mi alma, oh cariño se que seré miserable en el momento en que evoque las memorias que me hacen completamente tuya, porque aunque el tiempo transcurra el viento seguirá acariciándome, al igual que la fragancia presente en ese último abrazo que irremediablemente representó la fugaz eternidad a la que anhelábamos pertenecer...
Más aun dentro de todo mi sufrimiento recordaré; el tiempo en el que más viva y felíz fuí porque siempre seras tú, mi pequeño amor en el universo...
