Harry Potter's Temper ✔

Capítulo 2

El Bifrost se parecía bastante al floo, pensó Harry en que se sentía como si lo hubieran metido en una lavadora y luego lo hubieran escurrido para secarlo.

Las cadenas habían evitado que se desplomara por completo, en cambio colgaba de las manos de Thor, que parecía imperturbable por el inquietante viaje.

'Las formas mágicas de transporte nunca me sientan bien' pensó Harry, poniéndose de pie y acomodándose la túnica lo mejor que pudo con las manos atadas.

"Es desagradable al principio" dijo Thor, observando la figura desarreglada e inquieta de Harry.

Harry miró a su alrededor, a la sala con cúpula dorada. Y la estatua de un hombre que sostenía una espada.

"¡Ah, Heimdall, te agradezco el paso!" atronó Thor, dándole una palmada en la espalda a la estatua.

Harry se sobresaltó cuando la estatua respondió "Tus corceles han sido enviados a buscar, Mi Príncipe. El Padre de Todo espera tu audiencia" Con una voz profunda que parecía ecco a través de algo más que la cúpula dorada.

Thor se dio la vuelta, tirando suavemente a Harry de las cadenas, y lo condujo a lo que debía ser el puente del Arco Iris.

Los ojos de Harry se abrieron de par en par, su madre le había hablado de su belleza muchas veces antes, pero ninguna descripción podía dar luz al resplandeciente camino, aparentemente hecho de todos los colores y luces imaginables. Dirigiendo su mirada más allá, Harry divisó por primera vez el hogar de su madre, Asgard. Casas de color dorado cubrían la colina hasta donde alcanzaba la vista. Los árboles emergían de la masa esporádicamente, arqueándose como para proteger. Y elevándose desde el centro, por encima de todo, un castillo con torres que se elevaban en espiral hacia el cielo.

"Hogar" suspiró Thor. "Ven, nuestros corceles están aquí" Thor condujo a Harry hasta donde había dos caballos. Uno era negro como la noche, y estaba orgullosamente desbocado, pero el otro fue lo que llamó la atención de Harry.

Tirando de sus cadenas Harry trató de correr hacia el sementalede ocho patas, blanco como la nieve y con bridas. "¡Sl-n-r!" trató de decir, murmurando alrededor del hocico.

"¡Sobrino!" Exclamó Thor. "Detén esta locura".

Harry se limitó a fulminar con la mirada a su tío mientras era conducido hacia los caballos. Ese era su hermano. Cómo podía Thor soportar ver a su propio sobrino bridado y montado como si fuera un corcel poco inteligente.

Pasando las manos con tanto cuidado como pudo mientras trazaba las cicatrices y los latigazos frescos de su encarcelamiento, Harry se juró a sí mismo mientras apoyaba la cabeza en el flanco de Sleipner: "¡Te liberaré, y a todos nuestros hermanos!".

Con un tirón de su cadena y un seco "monta" de Thor, Harry se levantó y montó en el caballo junto a su hermano. Mientras volaban por el puente del arco iris y las torres se hacían más altas a medida que se acercaban, Harry podía sentir cómo aumentaba su aprensión. Llevaba años esperando este momento, soñando con visitar a su padre y liberar a sus hermanos.

Los caballos aminoraron el paso cuando las puertas se abrieron frente a los dos príncipes, revelando una plaza bulliciosa con mercaderes que gritaban precios y olores tentadores que se elevaban en el aire. Una ovación para Thor se alzó al paso de los dos y murmullos de Loki en tono hostil susurraron bajo la multitud.

'Me confunden con mi madre' resopló Harry, 'lo incriminan, lo llaman mentiroso y embaucador y sin embargo ni siquiera pueden reconocer que yo no soy él.'

Desoyendo a la multitud, esperó pacientemente su momento mientras su caballo subía los escalones del castillo antes de detenerse bruscamente ante una puerta doble. Una puerta tan alta que los gigantes de escarcha podían pasar de tres en tres.