Las tres ATS .

A principios de septiembre de 1944, el Segundo Ejército británico, bajo el mando del mariscal Montgomery, acababa de liberar Bruselas y continuó avanzando hacia la frontera holandesa casi sin oposición alemana, y mientras las tropas aliadas avanzaban sobre las carreteras belgas, un Jeep con tres mujeres a bordo viajaba rápidamente en una de ellas. Las tres ocupantes del vehículo eran mujeres uniformadas con chaquetas y faldas de color kaki, y con las siglas ATS en sus gorras, lo que evidenciaba que eran miembros del Servicio Territorial Auxiliar (ATS), la rama femenina del ejército británico durante la Segunda Guerra Mundial. La conductora era Sarah, una cabo de la policía militar femenina, junto a ella estaba la soldado-auxiliar Dorothy, vestida con la gorra azul de la Artillería Real, y en el asiento trasero y con su misma graduación, la conductora de ambulancias Jennie.

El jeep se detuvo en una encrucijada y las tres mujeres bajaron. La conductora tomó unos mapas y dijo "No estoy segura de qué camino seguir, pero creo que es por allí".

"Pues deberías saberlo, eres la que conduce y además la que manda", le respondió Dorothy sarcásticamente.

"Chicas, no discutan, es casi de noche y tenemos que llegar a nuestro destino lo antes posible", dijo Jennie para calmar a las otras dos.

"Sí, este es el camino, y sí, soy una cabo y su superior, ninguna de ustedes debe olvidar eso", añadió Sarah, un poco enojada.

"¡Estas mujeres de la policía militar femenina!, ¡el poder se les va directamente a la cabeza!", respondió Dorothy.

"Creo que voy a cambiar el color de mi lápiz labial, este color no me favorece para nada", comentó Dorothy mientras miraba en su pequeño espejo de belleza.

"Es una pena que me hayan negado el permiso en París que pedí", se quejó Jennie.

"Me encantaría ver París también", agregó Dorothy mientras guardaba su pequeño espejo en su bolso.

"Lo he visto y es una ciudad increíble: mi compañía de policía militar femenina estuvo estacionada allí durante una semana después de que la ciudad fue liberada", comentó Sarah.

"¡Qué gran suerte!" Jennie exclamó: "¡Es el sueño de mi vida ver París! De verdad, chicas, siempre he soñado con ver París y no sé cuándo se hará realidad".

Las tres mujeres se rieron y continuaron su camino, ahora que la oscuridad de la noche había caído profundamente.

La conductora, angustiada, detuvo el jeep y gritó "Chicas, no sé dónde estoy ... ¡Creo que estamos perdidas!".

"¿Perdidas?, ¡Qué extraño que tú, la inteligente, la cabo, la Sabelotodo, la Dama de la Policía, se haya perdido!" Dorothy exclamó sarcásticamente.

"¡Shhhhh! Callaos, chicas, escuché algo", comentó Jennie preocupada.

"¡Es el sonido de un motor!" Sarah gritó. Las tres mujeres bajaron del jeep y se dirigieron hacia los árboles en el bosque y hacia el ruido.

"¡No puedo ver nada! ¡Casi me engancho la falda en este arbusto!" Dorothy dijo enojada.

"¡Shhhhh! ¡No hagas ningún ruido!" Jennie interrumpió, y las tres mujeres se agacharon para mirar a través de algunos arbustos.

"¡Es un Panzer!¡Es un Panzer V Panther! ", Comentó Sarah preocupada.

"¡Son alemanes!" Dorothy exclamó.

"¡Dios mío!, ¡alemanes!" Jennie agregó, preocupada.

"¿Cómo pudo pasar esto, señorita Policía?" Dorothy le preguntó a Sarah.