Tension de la armonia

-Capitulo 4-

Toda la noche estuve intentando descifrar porque me había puesto tan nervioso frente a valentino.

Porque no lo voy a negar es muy lindo y su voz intimida, pero no lo suficiente para haberme puesto así, parecía gato en celo.

~ ¡Carajo!, debí haberme visto patético actuando así al menos nadie as lo vio...~ pensé poniendo la almohada en mi cara.

Me levanté de la cama para tomar agua, vi a la pequeña bola de pelos que tengo por gato durmiendo boca arriba como muerto.

Ojalá tener una vida tan simple que mis únicas preocupaciones sean coger comer y dormir.

Respire hondo y me acerque a la ventana, la vista desde ahí era preciosa, muchas luces y estrellas, se sentía tan bien relajarse un momento después de la semana de mierda que había tenido.

A demás que estaba a punto de tener la presentación de mi vida, sentía que al menos algo en vida estaba saliendo bien por una vez.

Vi la pantalla de mi teléfono brillar y me acerqué, tenía un mensaje de un número desconocido.

De: ****

"Hola, soy valentino y antes de que pienses que te estoy acosando Carl me dio tu número"

"Es que, aunque suene muy lanzado quería invitarte a conocer las vegas"

"Sé que es poco ético, pero di que sí, juro que te vas a divertir"

Tu:

"como podría decir que no a la oferta más tierna del mundo"

"pero si es muy de acosador haber conseguido mi número justo después de vernos"

"pero está bien rarito iré contigo"

Conteste eso conteniendo una risa, por lo directo de su conversación.

De: ****

"oh, te juro que pensé que dirías que no"

"juro solemnemente no estarte acosando, niño"

Tu:

"como me dices niño, solo eres un ano mayor"

"jajaja, eres muy raro valentino"

"nos vemos entonces, es de madrugada y necesito dormir, si no quieres Salir con un zombi"

De: ****

"no, definitivamente no quiero"

"descasa, niño<3"

Tu:

"tú también, acosador"

Bloqueé el celular con una sonrisa y me fui a dormir.

(****)

Al siguiente día estuve de buen humor mientras organizábamos el escenario.

-has estado muy feliz hoy, pulga- dijo luke pasando su brazo por mis hombros –¿puedo saber a qué se debe?

-nada, solo tuve una buena noche- dije mirando hacia abajo mientras caminábamos –y me invitaron a salir- dije sonriéndole.

-que? Quien- dijo exaltado.

-valentino- hice un ademan para restarle importancia.

-ah ese tipo- dijo con un tono molesto y desanimado, lo cual no entendí. –me alegro por ti, pulga- dijo para luego caminar hacia el lado contrario.

-Ok...? Eso fue raro- dije para mi mismo.

Mas al rato me estuve mensajeando con valentino, mientras me contaba de su trabajo me di cuenta que no era tan aburrido como parecía.

-¡oye mikah, ayúdanos a mover esto! – escuche a Uriel gritar desde lejos.

-¡ya voy! – le grite devuelta.

De camino me encontré con luke, tenia los ojos hinchados como si hubiera estado llorando.

-mikah... ¿podemos hablar? – me dijo con voz temblorosa.

-em... dame un segundo, necesito ayudar a los muchachos, solo espérame aquí ¿ok? – le dije preocupado y ansioso.

-esta bien...- dijo el con un tono más calmado.