𝐂𝐋𝐔𝐓𝐓𝐄𝐍 | ❝Venus era la rosa y Cedric la raíz que la mantenía viva.❞
Cuando Cedric conoce a Venus siente una gran conexión con ella. En un intento de cambiar su malévola actitud, se da cuenta de que aún existe humanidad en Venus, pero la chic...
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「 CAPÍTULO TRECE 」 【UN TEJÓN CELOSO】
24 de febrero de 1995.
La vida de Venus se complicó desde sus últimas vacaciones Navideñas, y no tuvo más remedio que preguntarse a sí misma en qué había fallado.
Evidentemente, ella no tenía la culpa de que su amiga a ratos estuviera enamorada de ella, o de que Andy no fuera la misma persona que dejó en la casa de los Diggory hacía casi dos meses.
A las horas de que Venus y Cedric volvieran en shock a la casa del chico, los padres de ambas familias se disgustaron mucho ante su desaparición, incluso se molestaron en avisar a los Weasley y familia Lovegood para que fueran enterados y les pudieran ayudar a encontrarlos.
Sin embargo, Venus no tenía ganas de discutir y le rogó a Elías que la sacara de allí y la llevara a la casa Karlsson, Cedric seguía en shock por lo enterado y tampoco tenía ganas de hablar con sus padres sobre a dónde y qué hicieron.
Al llegar a Hogwarts, Xenia y Venus no se hablaron, y fue real cuando vio con sus propios ojos como Xenia le pedía a Dumbledore que le cambiara de habitación, y no se dio por vencida hasta que Dumbledore le avisó una mañana de que había una plaza libre, y la habitación era de Pansy y Astoria Greengrass.
Desde entonces, Venus no volvió a saber más nada de ella, solo veía como asistía a las clases y no le decía ni hola.
Pero después de la tormenta siempre había un arcoíris, ¿no?
Pues el de Venus fue la petición de Cedric hacia ella: a mediados de enero, le preguntó que si quería ser su novia después de ganar un partido con Ravenclaw, y allí, delante de todos, incluso de Xenia, le dijo que sí, sin dudarlo ni tres segundos y se besaron, restregándole sin querer en la cara que debía apencar con lo suyo.
La pareja era muy jovial desde entonces, y dejó de interesarles Xenia, ya que tenían cosas más interesantes para hacer antes que tener que aguantar con la pena de Xenia, como dijo Venus a Nicole en un arrebato de cólera.
Le dolía en el alma, pero sentía que se había vuelto como Nicole, y ahí fue cuando terminó de comprenderla del todo.
Venus y Nicole querían ser de otra casa que no fuera Slytherin, necesitaban liberarse que aquellas tóxicas víboras que te amargaban el día en uno de ellos, pero la culpa la tenía Venus por decirle al Sombrero Seleccionador hacía seis años que la pusiera en Slytherin.
No podía quejarse, pero sí "cambiarlo" Venus decidió hacerse amigos de los tejones, acompañar en el Gran Comedor a los Hufflepuff, apoyarlos en sus partidos y sobre todo comportarse como ellos, no dejaría que los de Slytherin le pudieran, si les hacía caso, estaría bravamente perdida en un laberinto sin salida.
