Más tarde aquel día, cuando el doctor Choi hubo examinado exhaustivamente al paciente, Felix lo acompañó hasta el estudio de Minho. Cuando la puerta se cerró a sus espaldas, el doncel se quedó un rato mirando, con el corazón desbocado, ansiando desesperadamente alguna información. De pronto comprendió que había llegado el momento de dejar de lado su timidez y, sabiendo que el tiempo era sumamente valioso, llamó a la puerta. Jisung abrió, vio la cara de Felix y se apartó sin hacer preguntas. Felix entró en la habitación, donde Minho estaba sentado a su escritorio frente al médico, que sostenía su maletín negro sobre las rodillas.
—Felix también querría escuchar lo que va a decir —dijo Jisung, y ofreció a Felix la silla junto al médico.
Lleno de ansiedad y aprehensión, con la tensión del pánico apretándole el estómago, Felix se sentó. Intuía los ojos de Minho fijos en él, pero no dejó de mirar al médico.
—Y bien —dijo éste—, aún no puedo decirle con absoluta certeza qué mal aqueja al conde, pero si su padre murió del mal de Hodgkins, me preocupa.
—¿Es una enfermedad hereditaria, doctor? —preguntó Jisung.
El doctor Choi se frotó la frente, sin poder disimular la tensión en su mirada.
—Ha habido casos recientes en que se ha aludido a la herencia como causa posible, pero no sabemos lo bastante de la enfermedad como para decirlo con certeza. Pero, cuidado, es posible que el conde sufra de algún otro mal.
—De modo que quizá no se esté muriendo —acotó Felix.
Jisung le cogió la mano, y Felix intuyó que su cuñado no quería que alentara ninguna esperanza.
—Si es el mal de Hodgkins —dijo Minho —, ¿hay algún tratamiento?
Recuerdo haber leído acerca de una operación hace un par de años.
—Se han llevado a cabo operaciones muy exitosas. El mal de Hodgkins es un tipo de linfoma, y los linfomas se extienden a la sangre y a la médula espinal —dijo el doctor Choi, sacudiendo la cabeza—. Me temo que la prognosis no es buena... si es que se trata de la enfermedad de Hodgkins. Debo insistir en que no sabemos con certeza si es el mal que aqueja al conde.
—Sí lo es, ¿cuánto tiempo le queda a lord Hwang? —preguntó Minho, El doctor Choi reflexionó.
—Por los casos que yo he visto, pueden ser tres meses como puede ser un año, e incluso más, en casos crónicos. Depende de la rapidez con que progrese la enfermedad.
—¿Le ha dicho todo esto a Hyunjin? —preguntó Felix.
Justo en ese momento llamaron a la puerta y Jisung se levantó a abrir.
Cuando Felix se giró en su silla, vio a Jisung que abría los brazos y decía:
—Yeji, gracias a Dios. —Abrazó a la hermana de Hyunjin, que también la estrechó con fuerza—. Precisamente estábamos hablando con el médico en este momento. Entra.
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Felix's Loves -Hyunlix-
RomanceFelix ha pasado su infancia suspirando por un amor imposible, Hyunjin el mejor amigo de su hermano Minho. Para el, el dulce doncel no era más que un niño con el que compartía risas y juegos inocentes en la mansión de los Lee. Ahora, ese niño ha crec...