Almas gemelas [MiTakeHina]

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«¿Cuantas almas gemelas podemos tener?»

Eso había preguntado una vez una profesora cuando iba en quinto grado, la única respuesta obvia que dimos todos fue: «Solo una» seguida de varias risa emocionadas.

Toda una vida creí que mi gran amor solo sería una niña. Y eso sentí cuando conocí a Hinata, mi corazón latió tanto y sé que ella sintió lo mismo.

Pero aún así, justo cuando él me ayudó a quitarnos a Kiyomasa de encima mi corazón volvió a latir tanto que pensé que se saldría de mi pecho.

¿Era posible tener dos almas gemelas?

—¿Qué tanto piensas Takemicchi? —la pregunta de Mikey me sacó de mi trance.

—Estaba pensando. —respondí comiendo un poco de mi helado.

—Si piensas tanto talvez te fundas el cerebro. —Hina abrazó mi brazo, quitándome mi helado y tomando un mordisco antes de devolvérmelo.

—Seguro estaba pensando en la misma pregunta de la semana pasada —se burlo Mikey de mi mientras nos ofrecía un poco de su takayaki a ambos, también tomó mi brazo—. Ya te lo dijimos, somos un tercio de naranja cada uno y punto.

—Si, al menos con mi apellido es literal. —se burló Hina.

—Yo la verdad… los quiero mucho. —fue mi única respuesta. Estaba avergonzado pero feliz.

—Dejando eso de lado… ¿qué preparaste para nuestra cita?

—No es mucho… pero me esforcé para hacer algo especial para nuestro primer San Valentín juntos.

Los escuché reír, me alegro mucho de estar con ellos. Y me siento afortunado de tener dos almas gemelas.

Espero que les guste mucho la noria.