🌹Desastre inevitable🌹

Un encuentro inesperado

Era una noche fría de invierno a simple vista se podía observar las calles adornadas con lindas luces y bellas decoraciones navideñas sin embargo varias de estas luces ya no emitían esa luz resplandeciente, la nieve se precipitaba cubriendo de blanco las calles vacías, ya era demasiado tarde como para salir a pasear, a esas horas las personas estaban en su casa descansando no obstante paseando por las solitarias calles se encontró Kazuki, un joven de pelo rubio y de ojos rojos un color un tanto inusual, llevaba una sudadera con capucha roja y un abrigo verde oscuro hasta la rodilla acompañada de un pantalón azul marino, estuvo caminando hasta que se encontró un callejón en el que estaba una pequeña tienda abierta así que entro produciendo un leve sonido en la puerta que hizo que el vendedor, un señor anciano volteara a su dirección.

–Buenas noches joven se le ofrece algo

–Buenas noches señor, solo quería comprar unas cuantas cervezas – dijo kazuki con una sonrisa en el rostro mientras se dirigía a agarrar las cervezas

–Agradezco que compre algo en mi tienda pero joven a estas horas de la noche es algo peligroso salir hay muchas personas que cometen actos delictivos – dijo el anciano

–No se preocupe señor realmente vivo algo cerca de por aquí así que no camine mucho – dijo Kazuki mientras colocaba las cervezas en el mostrador – ¿Cuánto sería amable señor?

–1250 ¥, joven

Kazuki pago las latas de cerveza y se las llevó en una bolsa para despedirse del amable señor, mientras caminaba sentía que el frío aumentaba, cada paso que daba sentía su cuerpo pesado, lo que pasa era que le había mentido al señor su casa no estaba para nada cerca de esa tienda, el simplemente quería pasar afuera las últimas horas de navidad no le gustaba volver a su departamento frio y solitario lo hacía sentirse miserable consigo mismo, antes amaba esta época del año pero ahora solo la miraba como un dia mas del año aunque aun así lo hacia sentirse triste.

Por otro lado...

En esas frías y solitarias calles pasaban un auto de un modelo de marca carísima, en la parte trasera del auto mirando la ventana se encontró un joven llamado Rei de pelo negro recogido y ojos negros apagados, vestía un blazer negro combinado con pantalones de vestir negros además un chaleco gris y su conductor que tenia una mirada seria, el joven Rei tenia todo su atuendo cubierto de sangre, mientras miraba el paisaje de las frías y solitarias calles podía observar la nieva deslizarse hasta que su pacifica vista fue interrumpida por una llamada que tuvo que atender de inmediato

– ¿Acabaste la misión Rei? – se escuchó una voz autoritaria del otro lado del teléfono

–Sí jefe el objetivo fue asesinado – respondió Rei con un tono bastante apagado

– Entonces eso significa que ya estás volviendo a casa y no hubo ningún inconveniente? – preguntó el señor del otro lado de la línea

– No señor

– Bien

Esas fueron las únicas palabras que termino de emitir el señor para cortar la llamada, al darse cuenta de que la llamada había sido colgada Rei dejó de lado el teléfono para seguir admirando el paisaje frente a sus ojos, él sabía que ya era bastante tarde muchos ya habían ido a dormir además con ese frío ningún loco se atrevería a salir a caminar o pasear por ahí, seguro que algunos estaban en familia durmiendo plácidamente recibiendo abrazos aunque no le quisiera admitir le producía cierta envidia el tan solo pensar que otras personas pasaron nochebuena y navidad en familia y él estuvo ocupado asesinando gente.

Pero de repente esos pensamientos se detuvieron al ver que había un joven rubio ahí en la puerta principal de unos departamentos bastante antiguos y pensar que hace unos minutos pensó que nadie estaría paseando por ahí pero eso no fue lo único que perturbó sus pensamientos, también el hecho de que el auto se detuvo y no avanzaba se dio cuenta que algo andaba mal cuando el chofer se bajó a ver el motor del auto y el joven volteo a ver lo que había pasado. Así que él también se bajó y preguntó qué estaba pasando