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Sofía

-¿Segura que quieres ir?-pregunta por tercera vez Ana, mi mejor amiga

-que si, más segura que nunca- le respondo mientras sigo buscando algo en mí armario

Hoy era el día más feliz de mi vida, conocería en persona a mis jugadores favoritos y gracias a mi ex, hace tres semanas que Alejandro el que era mi novio en ese entonces me había obsequiado dos entradas para ver el entrenamiento del Barça con pases para verlos de cerca y pudiera hacerme fotos con ellos

Ahora se preguntaran ¿Como tu ex te las obsequio? Pues bueno hace tres semanas estuvimos de aniversario habíamos cumplido un año de relación, pero hace una semana lo encontré en la cama con su profesora de economía, créanme que fue una imagen super asquerosa. Debo admitir que si me dolió un poquito pero no como todos pensaban que me dolería, yo creo que fue por que ya no lo amaba como antes, nuestra relación ya era monótona siempre era la misma rutina y ya no lo amaba como pareja

Eran las dos de la tarde y el entrenamiento comenzaba a las cinco en punto, de mi casa al Camp Nou son solo quince minutos andando así que no me preocupa mucho, deje la ropa sobre mi cama y me metí en el baño para darme una ducha

-oye sof, ya recogiste todas tus cosas de la casa de Alejandro- escucho que pregunta Ana desde la puerta

-no, aún me quedan unas cosas yo creo que mañana las iré a buscar-le grito para que me escuche

Me había ido de la casa de Alejandro y ahora vivía con mi mejor amiga en un departamento bastante bonito, éramos nosotras dos y aveces uno que otro ligue de Ana pero nada más. Estaba terminado mi curso como fotógrafa y tenía que comenzar a buscar trabajo por que no era justo que mis padres se gastarán su vida manteniéndome y a pesar de que tengo uno que otro trabajito en alguna boda, bautizo y otras cosas eso no me sirve para sobrevivir

Terminé de ducharme y comencé a secar mi cabello, era pelirroja natura y a veces detestaba eso, la gente se empeñaba en decirme que si era teñida o como había hecho para tener ese tono en mi cabello o a veces me maldecían por ser así y que según ellos yo no le sacaba provecho a físico, a parte de ser pelirroja mi fisco estaba bastante bien, mi cara tenía muchas pecas esparcidas y mis ojos eran azules casi celestes, mi tono de piel es bastante claro por lo cual trataba de cuidarla lo más que podía, no era una chica con bastante curvas, pero tampoco carecía de ellas, me encontraba conforme con mi cuerpo

Termino de secar mi pelo y comienzo a vestirme, me coloco unos vaqueros rectos y una camiseta manga larga, enzima de esta me coloco la polera del Barcelona con el número 9 la de Lewandowski, el es mi favorito, eso no quita el hecho que los demás son fenomenal

-ya estoy lista- digo llegando a la habitación de Ana- ¿Nos vamos?

-termino de maquillarme y estoy lista- responde mientras me ve através del espejo que tiene enfrente

-Ana tu no necesitas maquillajes eres perfecta y hermosa así- le digo mientras me acerco y la abrazo colocando mi mentón en su hombro

-claro que no- dice con una pequeña mueca- tú lo eres, mirate nunca usas ni una gota de maquillaje y tienes a todos los hombres a tus pies- se da la vuelta y me aprieta las mejillas entre sus manos

-mejor ya vámonos- doy media vuelta y avanzó hasta llegar a la puerta principal

El camino se nos hace corto, la fila no era tan larga asi que no demoramos mucho en ella, nos dieron un pequeño recorrido hasta que llegamos a las gradas y nos informaron que en pocos minutos el equipo saldría. Mis nervios estaban a flor de piel, Ana de vez en cuando se burlaba por las caras que hacía, comenzamos a escuchar ruidos provenientes de un túnel, la gente comenzaba a sacar sus móviles y se acercaban al barandal que había enfrente de nosotras

Solo un beso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora