Metamorfosis

5

-¿Como te harás responsable?-

-Descuentenlas de mi paga, aunque para ser sincero, latas caducadas seria algo que el director debería saber, ¿no es así?-

La señora encargada de esa zona lo observó algo molesta antes de azotar la bitácora contra la mesa que él utilizaba.

-¿Te crees muy valiente para intentar amenazarnos? Eres solo un chico, conoce tu lugar-

-¿Amenazar?- al alzar su ceja derecha la miró -yo no creo que decirle al director que deseche latas caducadas se deba tomar como una amenaza. Yo solo cumplo mi trabajo como bodeguero-

La señora al no querer delatarse más solo se retiró de la bodega entre balbuceos que ella se decía a si misma y que eran inentendibles para él.

Divertido de lo reciente se levantó y caminó hasta la puerta la cual cerró con seguro.

-Ya puedes salir-

Detrás de unas cajas salió TaeHyung quien con aquel suéter puesto se acercó con cautela.

-Estarás en problemas- musitó el castaño quien lo miraba -no deberias hacer tanto por el pequeño...-

-Ya callate- al sentarse sobre una caja lo miró -TaeHyung. Llevamos ya dos semanas de conocernos y de que yo me las he ingeniado para que ese niño y tú coman bien, asi que dime, ¿crees que me interesa meterme en problemas?-

-¿Y si te despiden?-

-Para hacerlo deberán tener permiso del director y dudo que sin buenos motivos lo logren-

TaeHyung aún algo inconforme se sentó a su lado pero ante el peso y la caja algo inestable ambos cayeron de espalda contra el suelo.

Adolorido se sentó y observó a TaeHyung quien entre quejas aún seguía recostado en el suelo.

-¿Estás bien?-

-Si, solo que mi cuerpo no es tan fuerte en cuanto a los golpes- aclaró sentandose por igual -dime, ¿qué tan lindo es salir?-

-Depende del sitio al que vayas y el entorno en el que estés. Digo, hay lugares peores o iguales a este, pero también hay sitios bastante agradables-

-¿Y las personas?-

-Encontrarás de todo, eso te lo aseguro.-

-¿Encontraré a otras personas como tú? Me refiero en cuanto a personalidad-

-¿Y como soy yo?- indagó con curiosidad de su respuesta.

-Amable y atento- aseguró sonriendo -haces que me sienta cálido cuando estás junto a mi-

Tras escucharlo y al avergonzarce, desvió la mirada mientras carraspeaba evitando dar a notar el leve rubor que se colocó en sus pómulos.

-Creo que me tienes mucha estima...-