OMATICAYA PEACE - Avatar [Tsu'tey]

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Despues de la lucha con los soldados, que Quaritch sepa la existencia de nuestros hijos, que supieran nuestro estado, que sepan que tenemos familia, y eso es una arma muy poderosa contra nosotros, y no dejaremos que la utilizen.

Nos pusimos a discutir la mejor decision para el bien estar de nuestra familia y nuestros niños, Grace tambien estaba con nosostro, claro, una de las atacadas fue su hija.

Discutiamos, Neytiri y Tsu'tey no querian dejar a su pueblo, decian que la mejor desicion era pelear, en cambio, Jake y Grace preferian que huyeran, mientras eso mantuviera a salvo a los niños y al pueblo para ellos era la mejor desicion, aun si Grace no pudiera quedarse con su hija, la gente del cielo ya conoce a Kiri, ya sabe su paradero, pero no saben sobre Grace ni los demas cientificos, y si huyeramos y Grace nos acompaña, sabrian que el estado de los demas cientificos que nos acompañan, seria peligroso para nosotros y para ellos. Cada quien tenia su idea clara, pero yo no sabia que hacer, no queria dejar mi hogar ni tampoco a parte de mi familia pero si nos quedamos pondremos en peligro al clan y nuestros hijos, finalmente, ya se de que lado estoy.

Despues de un rato nos decidimos, nos iremos, iremos y reharemos nuestras vidas lejos de la gente del cielo, esperando que esta sea la mejor decision.

Grace con el mayor pesar de su alma dejo ir a su hija, si ella se disponia a ir se pondria en peligro y el resto de la gente. Eso no estaban en nuestros planes, prefeririamos evitarnos cuelquier desastre. Le prometi, le asegure que cuidaria a Kiri como siempre lo he hecho, ella estara sin su mamá, estaran separadas y ahora esta obligada a emigrar de su hogar. Hare lo mejor de mi para que mi hermana sea feliz y no tenga su corazon amargo por la falta de su madre. Dare lo mejor de mi en esto, la cuidaremos y amaremos como siempre lo hemos hecho.

La desicion ya estaba tomada y la ibamos a hechar en marcha.

Estabamos en nuestro ultimo dia en el clan, pasaban en deber de Olo'eyktan a otro hombre, a otro guerrero, a pesar de que ser lider del clan es un gran honor y trabajo, el rostro del nuevo lider radiaba de pena por la ida del fuerte Olo'eyktan que ha estado a cargo durante estos quince años. Despedirnos del cual fue nuestro hogar durante todos estos años es lamentable, despedirme de mi madre y que ella se tenga que despedir de sus dos hijas era doloroso. Despedirme de Trudy, mi otra mitad, mi dolor de cabeza, la necesitare tanto. Despedirme de Norm, mi amigo mas intimo, quien cuido de mis niños cada que lo nesecitaba, o cuando me cuidaba y ayudaba en mi embarazo. Los necesitare conmigo, son mi familia y desgraciadamente me tendre que alejar de ellos.

Nos ibamos uno detras del otro mientras la gente del clan nos miraba con pena, algunos lloraban con nosotros. Los protegeriamos, si lo nesecitaramos ellos irian a una guerra por nosotros, son nuestros hermanos.

Despegamos en nuestros Ikranes, mis hijos y esposo iban muy atentos a mi, como siempre. Seria un viaje agotador, iremos muy lejos de nuestro hogar. Jake y Tsu'tey nos guiaban, todos ibamos muy decaidos, todos los niños miraban como se alejaban de su hogar, era deprimente.

Viajamos por LLuvias fuertes, con el fuerte sol en nuestro rostro, luchamos y nos esforzamos para llegar a nuestra nueva estadia, esperando lo mejor para nosotros. Nos iremos al clan del agua, Los Metkayina. Son clanes muy alejados, tienen su propio mundo, espacio y vida, un nuevo comienzo alejados de todos y todo.

Despues de mucho vuelo sin descanso, llegamos, nos miraban raro, preocupados y curiosos. Era un clan muy bello, su espacio y fauna era hermosa, inigualable. Ellos eran muy distintos a nosotros fisicamente, tenian brazos y piernas mucho mas grandes, ojos distintos, y color de piel mucho mas clara, eran diferentes a nosotros y todo lo que he visto y eran hermosos.

Nos bajamos de nuestros Ikranes, todos nos observaban, cada vez mas personas se acercaban a ver lo que pasaba y el porque de nuestra llegada. Me voltee hacia mi esposo, se bajo y enseguida se dirigio hacia su arma.