warm smile 따뜻한 미소 ; chanjin

[3]

Hyunjin no tenía ataques muy a menudo, pero casa vez que los tenía sus padres no podían calmarlo y era por eso que se les hacía muy fácil darle anestésicos, pero ahora no quería tomarlos.

Ahora solo había alguien que podía calmarlo.

—¿Diga? —preguntó una voz al otro lado de la línea.
—¿Seoyeon?
—Hola Jessica, ¿pasa algo? —su voz reflejaba preocupación.
—Sí, ¿Podrías venir y traer a Chan?
—Claro, en 5 minutos estoy ahí.
—Gracias.

Jessica, la madre de Hyunjin subió las escaleras hacía el cuarto de su hijo, tocó la puerta y solo se oían sollozos y gritos. Era mejor esperar a que llegara Seoyeon y su hijo.

El timbre había sonado, al fin había llegado.

Jessica abrió la puerta y se encontró son Seoyeon cargando a un Chan dormido.

— Hola Seo, por favor pasa.
— Gracias, Channie se ha quedado dormido.
— No hay problema.

Chan de pronto empezó a despertar y la madre de Hyunjin le comento todo lo sucedido y espero a que pudiera ayudar.

— No se preocupe mamá de Hyunjin — Dijo inflando el pecho. — Yo lo ayudare. Sin más subió corriendo hacia las escaleras en busca de Hyunjin.

— ¿Crees que ayude? — Pregunto Seoyeon aún preocupada.
— Claro que sí —la tranquilizó con una sonrisa.
—Vamos, te invito una taza de té.
Se levantó y seguida fue Seoyeon acompañándola hacia la cocina.

— ¿Hyunjin? —pregunto Chan asomando su cabeza por la puerta.

Hyunjin estaba sentado sollozando en la esquina de su cuarto con un teclado domestico entre su regazo. Sus dedos pasaban por la teclas creando un sonido acogedor
Chan se quedó maravillado, no sabía que el peli-negro tenía talento tocando el piano, pero sabía que Hyunjin no era un simple niño con trastorno autista.

Las teclas ya no sonaron más y el peli-negro alzó lo ojos y se encontró con su manta reconfortante, el sol de sus dias grises, su manantial en el desierto, su rayo de luz en la tormenta.

—Chan —susurró sorbiendo sus mocos.

Cualquiera diría que parecía un pordiosero con toda su cara cubierta de lágrimas secas y sus mejillas con rastros de la sustancia pegajosa y viscosa producto de su llanto, y que al limpiarlas solo las embarró más y ahora están secas. Sí, definitivamente parecía un pordiosero, pero eso no le importo a Chan por que fue corriendo hacia él.

—Huroncito, ¿qué te ha pasado? —preguntó cariñosamente acorrucándolo en su regazo. Hyunjin solo negó.
—Te gusta tocar el piano — no era pregunta. Resulta demaciado obvio por el modo en el que lo tocaba.
—Yo... estaba asustado — admitió. —Pensé que no vendrías — dijo con un hilo de voz.
— ¿Cómo sabías que vendría? —preguntó confundido.
Pero el solo se encogió de hombros.
— El piano.

—¿Que tiene?

—Me calma —hizo una pausa y añadió —: cómo tú sonrisa.

Chan se comportaba como un todo un adulto debido a las novelas dramáticas que miraba a escondidas cuando su madre las ponía.
Pero al tener 8 años no impedía el hecho de que ambos se necesitarán más que el aire para respirar.
Ambos se habían hecho depende uno del otro.

Esa noche Chan se quedó de pijamada en la casa de la señora Jessica, era gracioso ver a un Hyunjin posesivo, cuando su madre le había dicho que le castaño se tenía que ir él solo le decía porque se lo quería robar.
Así que por la salud de Hyunjin —y sus berrinches —, Chan que quedó a dormir junto a él para después ser reclamado como su primera noche juntos.

Hola perdón por no aver actualizado, pero es que ya tenía el capítulo y cuando lo iba a subir, hubo un problema con las imágenes, y lo tuve que borrar,
Pero ya aquí está el capítulo espero lo disfruten.