CAPITULO 3

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AMIRA

Ingreso a la sala donde están las personas alías mi familia, Guillermo y Adara, están jugando dominó mientras al lado de ellos hay tres billetes y dos dagas.

— Hello — me siento al lado de Guillermo.— Quien va ganando? — pregunto, viendo una ficha.

— Obvio que yo— responde, airosa la esposa de mi tío.

— Porque yo quiero — se defiende, su esposo.

— Uy, parece que alguien no soporto — susurro. Adara suelta a reír.

— Cambiando de tema, mí, tesoro brillante— me mira con una sonrisa divertida— Que me trajiste? — pregunta, cómo niño chiquito.

Adara rueda los ojos.

—Lo bueno es que ya tengo lo que quería— abro mi cartera y le entrego lo que me pidió— Ya sabes que tienes que hacer, Tío — le digo con una sonrisa de felicidad, me levanto para ir a cambiarme, Adara mira con las cejas alzadas a mi tío.

— No es nada malo, si deseas puedes ir con nosotros — le dice él.

Avanzó hacia la habitación de mi hermano menor, abro la puerta sin hacer mucho ruido. Elek está durmiendo plácidamente mientras unos mechones se le bajan a su blanca cara, me acercó con cuidado y le acomodo su cabello, le doy un tierno beso en su frente y le tapo con la manta.

Salgo de su habitación, y me dirijo a la de mi hermana, el olor a guayaba inunda mis fosas nasales; mientras la de mi hermano huele a coco y lavanda.

Me acercó, su pijama con estampado de vaquita, me deja un déjà vu. En sus paredes decoran fotografías de la familia, de mis padres.

Recuerdo que ellos me pidieron ver un vídeo de ellos, entonces fuimos a la habitación de mis padres, y una cámara estaba en el guardarropa de la sección de mi difunto padre.

Le doy un tierno beso y le acomodo la manta; mañana tengo que llevarlos al acantilado, su lugar favorito.

Salgo de su habitación e ingreso a la mía, mañana tengo que volver a mi departamento, y volver a mi rutina.

Elijo una falda de cuero blanco, un top que la mitad es rojo y la otra mitad negro, botas largas de negras y un saco largo color negro.

Me ató el cabello en una cola mal amarrada y me dedico a cambiarme.


***

Bajo las escaleras con cuidado de no caerme, aún no dominó bien en andar con tacones o botas, Adara se encuentra con un pantalón de cuero negro apretado, un corsé y tacones blancos, Guillermo se acomoda su reloj.

— Antes muertos que sencillos — ellos me dan guiñada.

Mi tío me da la mano para ayudarme a bajar los últimos escalones.

— Vamos a una fiesta o a una carrera ilegal? — suelto una media sonrisa.

— A la mira de que la policía nos puede atrapar— salimos de la casa, y la esposa de mi tío suelta un silbido halagador al ver que me monto al Bugatti Chiron Súper Sport ; Guillermo se sube a su auto, Adara igual.

— El que llegue último paga la cuenta de la luz— digo, ellos asienten.

Me abrocho el cinturón de seguridad, y pongo en marcha hacia las afueras de la ciudad.

***

La música de Cartel de Santa nos recibe, me estacionó al lado de un hermoso Lamborghini color negro. Me acomodo la falda y avanzó hacia el puesto de inscripción, Adara y Guillermo están a mis espaldas mientras miran a su alrededor.

Motivos de Sangre. (LIBRO 2 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora