Prólogo

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Cómo terminé en esto? -me pregunté mientras sangraba frente a ella-

Yo quería salvarla, se lo prometí al rey.

-Inserta flashback épico-

Caminaba tranquilamente a comprar unas medicinas para mi abuelo, buscaba oportunidades para ser guardia en el castillo del rey, buscaba carteles desesperada, pasé por muchas calles hasta que encontré uno, había muchos niños ahí que decían "yo voy a ser guardia" o "ese lugar es para mí", pero yo sabía que ese lugar era para mí, me acerque para tomarlo, pero unos niños me alejaron.

Piensas ser guardia siendo una niña? -me preguntó uno-

¿Si, algún problema? -le pregunté-

Mucho, porque una simple niñita no puede con cosas de hombres –me empujó-

Yo me enojé y me acerque mientras apretaba mis puños

Te voy a demostrar que si puedo, y cuando sea guardia te voy a partir la cara peor que hoy -me abalancé sobre el, empecé a golpearlo como si mi vida dependiera de eso.

Vuelve a decirlo, YA –le grité con molestia-

PARA POR FAVOR, TE LO RUEGO, NO VUELVE A PASAR –me suplicaba con toda su alma, incluso gritaba del dolor que le provocaban mis golpes, debo admitir que me sentía bien mientras lo golpeaba-

Bien, pero quien es la mejor guardia? -pregunté mientras me burlaba internamente de el-

TU, TU LO ERES, ERES LA MEJOR HU TAO –dijo para después salir corriendo como niñita, yo iba a ser la mejor aunque me costara la vida-

Me fui de ahí, fui al palacio del rey ya que buscaban niños de arriba de 10 para ser guardias, yo entré y claramente era la única mujer, iba a demostrar que soy la mejor costara lo que me costara, había una especie de casita donde daban informes, fui y me inscribí por decirlo de alguna manera

Mira niña, te deseo mucha suerte en este mundo machista, sé que puedes ser alguien que demuestre que las mujeres no simplemente servimos a los hombres, pasa de aquel lado y lucha por eso. -me indicó el lugar y fui dando pequeños saltitos, estaba realmente emocionada.

Hola, vengo a participar en lo de los guardias –dije con una sonrisa, primero tenían que medirme, luego el peso y por último las habilidades-

Bien, pasa por acá -me llevaron a algo que parecía ser un campo de entrenamiento-

Tu peso es de 52.5 kilos, mides 1.67 centímetros, estas casi dentro, solo faltan tus habilidades

Pasé al campo de batalla, me dieron una espada que parecía estar forjada hace ya algo de tiempo, empecé con los más pequeños, luego los más grandes, no paraba ni por un segundo, vi un poco hacia arriba y ahí estaba ella, la hija del rey zhongli, yanfei, su hermosa piel de porcelana, su pelo color algodón de azúcar, sus ojos verdes, era simplemente hermosa, un enemigo iba a atacarme y como reflejo lo detuve, yanfei me vio y me sonroje sin querer, seguí hasta que termine con todos, el que me llevo dijo que iban a llamarme luego si me aceptaban, no perdí las esperanzas en ningún momento, yo iba a entrar ahí aunque me costara todo.

Salí feliz ya que podía ser aceptada por mis habilidades, estaba que saltaba de la emoción pero mientras caminaba alguien se me acercó por atrás y me golpeó, caí al piso en seco y simplemente vi quien era, era el niño de hace rato sonriéndome de forma burlona mientras su hermano mayor me veía con odio por pegarle

Que carajo te pasa? -le pregunté mientras me tocaba el lugar donde me golpeó-

Si tu le pegaste a mi hermano yo tengo el derecho de pegarte a ti -me dijo mientras se burlaba de mi por verme tirada en el suelo sin oportunidad de defenderme-

El se lo merecía, aparte, ¿No puede defenderse el solito? Se supone que es hombre -le dije para después levantarme y sacudirme un poco-

Se quedo callado ya que no sabía como responder sin terminar humillado

Te comió la lengua un ratón? Ja -me burlé y me fui, lo escuche correr destras de mi y esta vez no pude detenerlo ya que desafortunadamente el si tenía un plan B, yo no, termine en el piso más golpeada que antes, sangrando y con dolor, no debí meterme en esto.

Me levante un tiempo después para ir a mi casa, caminaba con demasiado dolor pero no tenía otra alternativa más que aguantarme y caminar, iba por todas las calles algo cansada, incluso podría decir que me quería desmayar

Hu tao, estas bien? -me pregunto alguien-

Vi rápido quien era, era xiangling, la abracé porque ya me sentía realmente cansada.

No, no estoy bien, estoy ... muy cansada, realmente agotada, llama a mi abuelo, por favor -le pedí casi rogandole, me dijo que me apoyara en su hombro y que ella le iba a hablar después de que me sintiera bien, a él realmente no le importaba si llegaba o no, solo le importaba una heredera de su supuesta fortuna-

Siéntate, te traigo agua o algo? -me dijo con un tono de voz que parecía que se estaba preocupando por mi-

Agua, si por favor -fue corriendo a decirle a su papá, el gran chef mao-

Espere sentada, no podía hacer ni el más mínimo movimiento porque me dolía hasta pestañear, porque lo hice? Me pregunté media hora, realmente quería esto?, me cuestionaba tantas cosas que ni siquiera ponía atención a mi alrededor o a cualquier otra cosa, simplemente pensaba en porque lo hice.

Aquí esta tu agua hu tao, puedes quedarte hoy aquí si quieres, no puedes ir en este estado con tu abuelo, te va a dejar peor -lo peor es que tenía razón, tan solo de verme comenzaría a golpearme hasta dejarme inconsciente-

Gracias xiangling, no se que haría sin ti o sin los demás, son lo único bonito que me queda -le sonreí con mis últimos esfuerzos, estaba realmente agradecida por el simple hecho de que acepto que me quedara aquí con ella, amo tenerla como amiga, probablemente estaría muerta sin ella-

No tienes nada de que agradecerme, para eso estan las amigas tao, hasta que se me permita voy a estar para ti -me abrazo y me llevo a su habitación para que yo pudiera dormir-

Primero te voy a curar y luego te puedes dormir, no puedes llegar así mañana a tu casa, te mata tu abuelo si te ve así -puso su mano en mi mejilla mientras la acariciaba un poco, tengo que aceptar que me gustaba un poco-

Eres una de las primeras personas que se preocupa por mi xiangling, te quiero mucho -la abracé otra vez, se notaba el cansancio en mi voz y cuerpo, ella no me soltó hasta que me dormí-

Descansa tao, nos vemos mañana -apagó la luz para que yo durmiera tranquila, ella era una de mis únicas amigas verdaderas hasta ahora.-

Una prioridad? (Yantao medieval AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora