Corazones [J.H] [PROX]

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Jasper estaba más feliz que nunca pasaba casi todo el día sonriendo, sus compañeros lo hacían feliz.

La guardias con Bella seguían, pero ahora con dos nuevos integrantes Naeva y Orión, ellos hacían las guardias con Jasper permitiendo que los lobos descansen en esos momentos. Bella no se sentía muy segura y tenia dos razones la primera era que Jasper casi la mataba en su cumpleaños y la segunda es que los jaguares casi la mataban junto con Edward y Sam.

Ellos la entendían así que le daban su espacio y Naeva parecía una niña pequeña iba conociendo el mundo humano, hacia muchas preguntas sobre casi cualquier cosa.

Para Jasper y Orión era muy divertido ver como se emocionaba con las cosas más básicas como ver por primera vez una película, usar el teléfono, estar en un carro. Todos le ensañaban cosas y Esme no fue la excepción ella le enseño a cocinar.

—¿Esme como haces eso? —pregunto mirando un sándwich con queso derretido.

—¿Quieres que te enseñe? —Naeva asintió con entusiasmos.

Naeva se lavó las manos como Esme se lo indico, seguía los pasos que le indicaba y si se equivocaba Esme le decía en cual fue su error y le ayudaba a corregirlo. Le ayudo a prender la estufa, media hora después ya había dos pares de sándwiches un par eran de Esme y el otro de Naeva, Orión llego junto con Jasper después de un corto paseo.

—Vengan— ambos hombre fueron arrastrados a la cocina por su compañera —¿Cómo se ven? —pregunto señalando un plato con el par de sándwiches.

—Se ven bien, ¿puedo probar uno? —Orión recibió una respuesta afirmativa de su compañera y no lo pensó dos veces para comer uno —está muy rico ¿Quién lo preparo?

—Yo lo hice y Esme me ayudo —salió de la cocina y fue directo a la sala donde se encontraba la mencionada —Esme si le gusto, ahora ya se cocinar— la felicidad con la que hablaba hizo sonreír a Orión hacia demasiado que ella no estallaba de felicidad.

Definitivamente Esme se volvió su persona favorita, obviamente después de Orión y Jasper.

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Pronto habría una fiesta en la casa Cullen, la primera de los jaguares los cuales tenían ideas vagas de cómo era una. La humana no parecía muy feliz y Orión no sabía él porque, no se sentía cómodo preguntarle directamente así que fue con el vampiro en el que más confía Jasper. Lo busco por la casa y no lo encontró, siguió su aroma y lo encontró recostado en un árbol con Naeva entre sus piernas, la tranquilidad lo relajaba y no tardo en acercarse siendo recibido por una sonrisa del rubio y un abrazo de la femenina.