La vi

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Cuando nadie la veía yo lo hice, ubicada dentro de mi localidad, exagerando su forma tan sencilla de enseñarme a disfrutar los placeres de la vida y con ellos ayudo a sanar cada cicatriz en los momentos de angustia.
Casi siempre camina por el pasillo donde encuentra mi aflicción y el resto de emociones. Con frecuencia trata de estimular cada paso, cada decisión que probablemente pueden derivar unos planes perfectos (por que cuando se es joven se aprende a soñar despierto) y con mucha razón de ser es una admir
ación poseer su inigualable carácter lleno de seguridad e inestabilidad.
Sin muchos doctorados en diferentes ámbitos, ella es mi médico sin título, mis palabras sin fundamento, mis anhelos lleno de misterios, ella es mi vida!
Es mas allá de las dispocisiones que se nos otorga, su palabra fue mi escuela, su respeto mi forma mas autentica de educarme, es su tacto quien conmueve cada parte de esta alma fría e indomable...

DesahogoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora