La razon de Sofia P1 - Capitulo XI

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Sin señal - Quevedo & Ovy on the drums 🎧

Corriendo tratando de alcanzarlo al fin pude.

-Pablo, no es lo piensas, pensé q eras tu - dije tambaleandome, hablando con la poca conciencia que tenía

-No te das cuenta, lo arruinaste - dijo el, yo sabía que el tenía eso de reaccionar mal y trate de calmarlo

- Ya Pablo, cálmate- dije encimandome a su pecho

-Sofia, estas ebria? - dijo el confundido, no sabía que había tomado tanto. No contesté hasta que me caí en sus brazos, el me agarro de la cintura y nos dirijimos al coche.

Yo me dormí y cogio camino a su casa, no sería apropiado que me lleve a mi casa en este estado.

Me bajo del auto, abrió la puerta y me llevó rumbo a su habitación.

Ya era de día y me desperté con un dolor de cabeza muy fuerte, pero volteé y estaba él acurrucado en la sabana muy pegadito a mi como un niño a su madre.

No quise despertarlo ya que no sabia si se habían arreglado las cosas finalmente, no me acuerdo de absolutamente nada.

-Te despertaste - dijo Pablo en un tono desagradable con vista a la ventana - ahora que no estas "ebria" me explicaras todo?

-Si pudiera recordarlo todo y si arreglara todo entre nosotros, no tendría ningún problema. Pero sabes que yo no quisiera estar con nadie que no seas tu y si necesitas explicaciones para comprobar que realmente no te estaba engañando las daré- dije mirándolo fijamente a los ojos

-Explicame entonces, como son realmente las cosas - dijo el con una mirada desafiante

-Estaba ebria y ese chico, que pensé que eras tu, empezó a bailar conmigo, luego me beso y no te voy a mentir le seguí el beso. Pero pensé que eras tu Pablo - dije mientras caían lágrimas por mis ojos.
Él corrió hacia a mi agarrándome de la cintura, chocando a propósito sus labios con los míos

-No llores, linda - dijo el entre risas - Esta todo bien ahora, solo nunca más tomes

-Esta bien, Pablito- dije abrazándolo apoyando mi cabeza en su hombro

-Quieras bajar a desayunar - pregunto el

-Claro que si - respondí

Desde ese día dude que este satisfecho conmigo, lo que me hizo entrar en duda si me quería o solo me usaba. Pablo no era así, pero tenía tantas inseguridades.

Pasó casi un mes desde ese día, pero esta es la segunda razón por la cual supe que todo terminaría aquí.

-Buen día, Sofita hermosa! - dijo el saltando en la cama

-Aay Pablo, eres medio pesadito - dije yo

A Través Del Campo • Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora