Yo en Nazarick ( Overlord y su angel caído )

Jugadores...

Ya paso unos días desde la pequeña pelea con los ogros, Kalea y los otros recorrían el territorio tranquilamente mientras recolectaban información.

Para decepción de Kalea no parecía haber alguien más como jugador, aunque claro estaba que todos tenían voluntad propia. Otro cosa al que le preocupaba era el lugar en donde se encontraba, los nombres de los reinos y territorios no le eran para nada familiares... o tal vez simplemente cambiaron ¿?

Eso complicaba aun más su búsqueda de la ubicación del gremio... El pantano en la que se encontraba puede ser la de cualquiera que se conoce en el mapa que obtuvieron.

Pero algo le cautivo, un misterioso personaje fuera de lo común apareció... Momon. Segun la información de Souei, era un aventurero que apareció de repente y que poseía una fuerza y magia de alto nivel. Y habilidades nunca vistas anteriormente.

- ... Este momon, ¿en donde se encuentra ahora mismo?

- Actualmente se encuentra en E-Rantel, my lady - respondió Souei

- ¿E-Rantel...? Pero que nombres más raros.. - dijo lo ultimo en susurro aunque sus súbditos lo escuchara de todas formas - Ha... ¿Y como aparenta..? ¿Es siquiera un humano?, tener habilidades de control de ese nivel requiere de gran experiencia y magia... - dijo seriamente

- Aunque no se conoce su apariencia exacta... Solo es visto llevar su armadura negra de alta calidad, dos grandes espadas... Su apariencia bajo su armadura es desconocida.

- Desconocida, ¿eh?

- Tambien lleva con el una compañera, una joven hechicera de alto nivel. Su nombre es Nabe - informo Benimaru

- ... De casualidad... Benimaru, Souei, ¿an obtenido alguna imagen de los dos?

- Solo de la señorita Nabe, solo ella regreso para recaudar su recompensa.

- Muéstramela- ordeno de inmediato por lo quel oni obedeció sin rechinar.

Era una joven de cabello largo y liso de un color que competia con la noche misma. Su expresión seria y pocas emociones, aun así era toda una belleza. A su lado había una bestia, una especie de hamster gigante con cola de serpiente o algo parecido, pero no era de importancia.

Como pensaba Kalea, esa joven era Narberal Gamma... una de las doncellas de batalla de Ainz Ooal Gown...

- Ya lo he decidido!! - dijo levantándose de repente de donde se encontraba

- ¿Mi señora...? - preguntaron los cinco onis a la vez, sorprendidos por la repentina acción de su ama

- Nos dirigiremos a E-Rentel... ya encontre a la persona que buscaba.-

- ¿Se refiere aquella humana, mi señora? - pregunto Shion curiosa al no entender porque un ser tan poderoso como ella buscaba a una humana. Era poderosa, tal vez, pero humana.

- Bueno, no del todo. Estoy más interesada en su compañero. Ese tonto, podria usar otro nombre, pero supongo que me facilitara las cosas. Ah! y quiero aclarar que ellos dos no son humanos, sobre todo Momon, seria una ofensa llamarlo así

- Entonces, ¿que son, mi señora?- Pregunto esta vez, Shuna.

- La chica es creación de uno de mis viejos amigos para proteger nuestro hogar, no es humana pero tampoco un demonio. Su único propósito es luchar contra aquellos que se atreven a profanar en nuestro hogar y obedecer nuestros ordenes.

- ¿"Nuestros ordenes", my lady... ?- hablo esta vez Benimaru

- Ah... supongo que debería de decirles antes... Anteriormente yo pertenecía a un gremio poderoso de monstruos o simplemente no humanos. Había 41 de nosotros, aunque poco a poco fueron renunciando por motivos personales, incluyéndome. Cada uno de nosotros poseíamos gran nivel de maldad y habilidades. Juntos o individualmente creamos artefacto mágicos bastante utiles, sea de protección, ataque, infiltración,... incluyendo a Narberal o Nabe.

- Ella era creada... ¿?

- Así es junto a muchos otros más. El nombre de nuestro gremio es Ainz Ooal Gown y uno de mis compañeros y más tarde líder es ese aventurero, Momon o Momonga como yo lo conozco.

- ¿Pero que aria el líder disfrazado como aventurero? - dijo Shion

- Supongo que lo mismo que nosotros... Este reino como los demás, no me suenan en absoluto y seguramente a el también le extraña este mundo. Aunque tenga similitudes a como nosotros lo que nosotros conocemos. Tal vez es el mismo mundo, pero diferente.

Todos permanecieron en silencio, no entendían mucho de lo que decía su señora, pero tenían que obedecerla y seguirla.

Sin importar que, su pasado o futuro, la seguirían hasta el final de sus días y daran su ultimo aliento para cumplir sus ordenes y deseos.