Inseguro

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Habían pasado varios meses desde que la tribu supo que Aonung estaba embarazada del hijo de Neteyam y todos estaban felices y alegres con la idea.

Pero aunque Aonung estaba tan feliz como ellos de dar el fruto de su amor, tenía algunas inseguridades sobre su peso.

Y sí, como todas las mujeres y hombres de su tribu que habían quedado embarazados, había engordado unos cuantos kilos. Su hijo era un gran gourmand, lo recogió en medio de la noche solo para comer frutas que no tenía en su choza, obligando a Neteyam a ir a buscar algunas.

Aunque Neteyam le había dicho que no le importaba mucho y que solo quería satisfacer a su Aonung y a su hijo. Aonung no pudo evitar sentirse culpable, no le gustaba sentir que necesitaba ayuda, estaba en su personalidad.

Pero lo que menos le gustaba era su aumento de peso, se lo había llevado en caderas, estómago, pecho y en el trasero también. Aunque Neteyam le había dicho que lo encontraba hermoso, no pudo evitar sentirse horrible, no horrible para llevar la vida, un niño pero horrible por su cuerpo. Nunca había sido tan grande, sí ya había subido de peso pero no tanto.

Además, no podía salir a caminar con su ilu porque no era bueno para el bebé. Y lo extrañaba, sí, podía ir a nadar, pero no era suficiente.

En ese mismo momento, estaba sentado en el suelo de su choza acariciando su barriga de 5 meses. No le gustaba sentir que necesitaba ayuda, estaba en su personalidad.

Pero lo que menos le gustaba era su aumento de peso, se lo había llevado en caderas, estómago, pecho y en el trasero también. Aunque Neteyam le había dicho que lo encontraba hermoso, no pudo evitar sentirse horrible, no horrible para llevar la vida, un niño pero horrible por su cuerpo. Nunca había sido tan grande, sí ya había subido de peso pero no tanto.

Además, no podía salir a caminar con su ilu porque no era bueno para el bebé. Y lo extrañaba, sí, podía ir a nadar, pero no era suficiente.

En ese mismo momento, estaba sentado en el suelo de su choza acariciando su barriga de 5 meses. No le gustaba su cuerpo, finalmente descubrió que su aumento de peso era significativo.

Mientras estaba en sus pensamientos, no se dio cuenta de que Neteyam acababa de regresar, Neteyam vio que Aonung estaba en sus pensamientos, por lo que pasó detrás de él para abrazarlo, lo que hizo que Aonung se sobresaltara. Neteyam puso sus manos sobre el vientre de su amada y Aonung puso su cabeza sobre el hombro de su pareja.

- Mi Aonung, ¿por qué te molesta tanto? Preguntó Neteyam, acariciando su vientre.

- Es un pensamiento estúpido, no te preocupes por eso.

- No, no es. Dime lo que te molesta. preguntó preocupado. .

Aonung suspiró frente al ardor de su compañero.

- Tomé... cómo decir... peso y siento que mi cuerpo está empujando hacia atrás. Termina diciendo vergonzoso de sí mismo.

- ¡¿Qué?! Exclamó Neteyam sorprendido. - Eres cualquier cosa menos repulsivo. Dijo que lo tranquilizara besándolo en el cuello.

- Dices eso porque estás locamente enamorado de mí. Suelta a Aonung, sonriendo suavemente.

- Tal vez pero te digo y puedes creerme que eres el hermoso embarazado que nunca he visto. Respondió Neteyam mientras continuaba con sus besos en el cuello de Aonung.

Aonung se sintió más, cómo decirlo, más en paz con su cuerpo cuando Neteyam le dijo hermosas palabras como esa.

- Y además... Dice Neteyam, bajando sus manos hacia las nalgas de Aonung. - Aquí, está tan rebotando y me gusta. Termina agregando antes de dejar una piruleta en la espalda de Aonung.

Aonung se sonrojó ante el comentario de su pareja.

Aah, solo eres un idiota. Dijo, sonriendo y sonrojándose.

Esto hace reír a Neteyam, divertido por la vergüenza de su Aonung.

Y pasaron la noche diciéndose palabras, especialmente Neteyam que quería tranquilizar a Aonung. Mientras se besa a veces. ¿Se besan?














Fin









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One-shots | neteyamxaonung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora