cute ghost

XLVIII

Hyunjin y Félix se encontraban preparándose para dormir pues acababan de llegar a casa después de un día muy cansado pero lindo

- hyung- murmuró Félix sonriendo mientras abrazaba por la espalda al mayor tomándolo por la cintura

- ¿hmm?- balbuceó mientras lavaba sus dientes

- me hace muy feliz..lo amo demaciado - insinuo abrazando al mayor quien solo sonrió mirando al menor

Minutos después el par se encontraban recostados en la cama mientras se daban mimos cuando Félix comenzó a sollozar

- bonito ¿Que sucede?- pregunto Hyunjin preocupado abrazando al menor mientras acariciaba sus mejillas limpiando sus lágrimas

- n-no quiero alejarme de usted hyung...lo amo demaciado - balbuceó entre lágrimas

Hyunjin solo lo miro confundido, no entendía el por qué felix se estaba comportando de esa manera

- eso jamás pasará bonito, nunca vas a alejarte de mi..te amo demasiado y no voy a permitir eso- nego calmando al menor pero eso solo lo empeoró

- es lo más precioso en este mundo hyung, quiero que sea muy feliz- murmuró abrazando al mayor quien solo sonrió apunto de quedarse dormido

Después de unos minutos de tragarse sus lágrimas Félix al fin pudo llorar pues de verdad sabía que sufriría demaciado..

Hyunjin se levantó muy feliz pues había tenido un muy bonito día anteriormente pero al notar que el menor no estaba comenzó a entrar en pánico...

- ¿Cariño?- balbuceó nervioso buscando al menor por todos lados pero este no estaba

Rápidamente llamo a minho pues probablemente este estaba con el

- buen di-

- ¿Está Félix contigo!?-

- buenos días minho de mi corazón, ni eso ugg-

- ¿Está ahí contigo!?-

- si Hyunjin, maldito desesperado-

- ¿Y por qué no me avisó?-

- lo siento hyung, se veía muy lindo durmiendo y decidí no despertarlo-

- cariño, debiste haberme avisado al menos ¿Que haces con ese idiota?-

- yah!-

- le estamos preparando una sorpresa a jisung hyung-

- bien Hyunjin, adiós por qué me llenas de virus mi celular -

- adiós pedazo de homosexual-

- ushh, maldito - se quejo minho rodando sus ojos

Minho iba a decir algo cuando noto que Félix estaba sollozando