Issei el señor del inframundo

dia de la subasta:torneo inicial

Issei abrió lentamente los ojos y sintió un fuerte dolor de cabeza. Trató de sentarse en la cama, pero se sintió mareado y tuvo que recostarse de nuevo.

"¿Qué diablos pasó anoche?", se preguntó a sí mismo.

Lentamente, los recuerdos de la noche anterior comenzaron a regresar. Había sido invitado a una fiesta con algunos conocidos de Tyr.

Issei recordó que Tyr lo había convencido de tomar un trago y después otro, y otro más. Aunque al principio se había sentido bien, pronto se dio cuenta de que había bebido más de lo que podía manejar.

Las risas y las conversaciones en la fiesta parecían haber sido divertidas en ese momento, pero ahora todo lo que Issei podía sentir era dolor de cabeza, náuseas y una sensación general de malestar.

"Maldición", murmuró para sí mismo, "¿por qué dejé que Tyr me convenciera de beber tanto?"

Decidió levantarse y caminar hacia el baño de su habitación. Cuando se miró en el espejo, se dio cuenta de que su piel estaba pálida y sus ojos estaban hinchados. "No puedo creer que me haya dejado llevar así", pensó. Se lavó la cara y se cepilló los dientes, esperando que eso lo hiciera sentir un poco mejor.

Finalmente, Issei decidió que tenía que hacer algo para aliviar sus síntomas. Tomó un vaso de agua con miel que sus amigos le dejaron en la mesa y se acostó en la cama, decidido a descansar y dejar que su cuerpo se recuperara.

"Nunca volveré a beber tanto", se prometió a sí mismo mientras cerraba los ojos y se concentraba en su respiración.

En la época en la que Hades era el gobernante del inframundo y de los muertos, había una cierta rivalidad entre él y sus hermanos, Zeus y Poseidón. Aunque los tres hermanos compartían el mismo padre, Cronos, cada uno tenía su propio reino y su propio conjunto de habilidades.

Zeus y Poseidón eran conocidos por su capacidad para beber grandes cantidades de alcohol sin perder el control. Hades, por otro lado, no era tan bueno en eso. De hecho, tenía muy poca tolerancia al alcohol y se embriagaba rápidamente.

En una ocasión, durante una gran celebración en el Olimpo, Hades decidió beber en exceso para impresionar a sus hermanos. Sin embargo, pronto perdió el control y comenzó a hacer comentarios inapropiados y a comportarse de manera grosera con los otros dioses.

Desafortunadamente, las consecuencias de la mala elección de Hades no se limitaron a la fiesta en el Olimpo. Mientras estaba borracho, Hades lanzó un hechizo que accidentalmente levantó una invasión zombie en Grecia. Los muertos vivientes comenzaron a salir de sus tumbas y a atacar a los vivos, causando caos y destrucción en toda la región.

Al principio, Hades no se dio cuenta de lo que había hecho. Pero cuando se enteró de la situación, rápidamente se dio cuenta de que debía hacer algo para remediar el problema que había causado. Con la ayuda de sus hermanos y otros dioses, Hades logró controlar la invasión zombie y restaurar el orden en Grecia.

Después de ese incidente, Hades aprendió a moderar su consumo de alcohol y a ser más consciente de sus poderes. Nunca volvió a beber en exceso y se aseguró de que sus hechizos fueran utilizados de manera responsable. Aunque nunca fue tan habilidoso como Zeus o Poseidón en el arte de beber, Hades aprendió a aceptar sus limitaciones y a utilizar sus habilidades para el bien de todos.

Issei al recordar ese momento se avergonzó y al notar que no tenía ningún dolor en su cuerpo, se dio cuenta que no hizo ninguna estupidez en la borrachera y eso le dio alegría, pero al mirar noto que había una nota de papel cerca de su cómoda.

Al acercarse a leer la nota fue clara su sorpresa que estuviera hecha de una tinta que si no tienes alguna clase de poder sobrenatural seria imposible de leer, parece que esto fue escrito por Tyr para que ningún humano la leyera por equivocación.