Prologo(C)

5.7K 324 8
                                    


Lentamente, cuatro jóvenes asustados empezaron a despertar en un lugar oscuro.

—¿Dónde estamos? ¿Qué es este lugar? —se escuchó decir a una voz joven.

—Shhh, no sabemos dónde estamos, no hables tan fuerte, JingYi —dijo alguien débilmente a su lado, y luego cayó el silencio. Sin nadie más hablando, se podían oír muchas respiraciones, algunas suaves y otras más agitadas.

De pronto, se encendieron luces. Con el pequeño estruendo que emitieron al prenderse, algunos en la habitación dieron un salto. Mientras los ojos de los presentes se acostumbraban al drástico cambio de iluminación, se escucharon saludos alegres.

—¡Hanguang Jun! ¡JiuJiu! ¡Fùqīn! —dijeron cuatro voces emocionadas al ver a sus mayores, mientras corrían hacia ellos.

—Sizhui, JingYi —dijo uno de los hombres, calmadamente saludando a sus discípulos, quienes hicieron una pequeña reverencia.

—Hanguang Jun, ¿sabe cómo llegamos aquí? —preguntó A-Yuan, algo nervioso por la situación.

—¡Sí, estábamos dirigiéndonos a una cacería cuando nos dormimos en el camino y despertamos en este extraño lugar hace un momento! —comentó JingYi, algo más alterado que su amigo.

Hanguang Jun negó con la cabeza.

—También desperté aquí. Sean pacientes y estén atentos —exclamó sin descomponerse, a diferencia del resto de la habitación, que, entre pánico y enojo, intentaba buscar una salida. Los amigos de sus discípulos también se reunieron con su padre y tío respectivamente, aunque uno parecía más acalorado que el otro al recibir al menor.

Se encontraban en una habitación bastante grande, con muchas butacas y un escenario al frente. Tras el escenario, había una tela blanca gigantesca, y en la parte de atrás de la sala, un pequeño cuarto con un hueco cuadrado en la pared. Era un lugar bastante peculiar. En la parte lateral había una puerta que, a pesar de los esfuerzos de los fuertes cultivadores, no se abría ni con las patadas más fuertes. La puerta permanecía intacta.

Estaban completamente encerrados.

Aproximadamente 40 minutos después de despertarse, los cultivadores ya se habían calmado y reunido con sus respectivas sectas. Los líderes presentes se juntaron y, tras una pequeña discusión, acordaron que no tenían otra opción que esperar. Fue en ese momento que la puerta se abrió y entró una mujer alta y esbelta. Tenía una mirada fría, cabello negro y largo, facciones finas y delicadas. Llevaba túnicas grises con una cinta negra amarrada a su delgada cintura y una espada negra colgaba a su costado. Caminaba con paso firme y no se inmutó al ver a los presentes tomar una posición de ataque. Cruzó por un costado y subió lentamente al escenario.

—Bienvenidos —dijo la mujer con una sonrisa, que, si te fijabas de cerca, era algo juguetona—. Les agradecería que bajaran sus armas y tomaran asiento... o me veré obligada a desarmarlos.

—¿Tú? Ja —bufó un hombre desde el fondo, con una actitud arrogante que ni siquiera los líderes de sectas más grandes mostraban en ese momento, ni siquiera el líder de la secta Jiang, quien, aunque mantenía un aire de superioridad, también era precavido.

—Sí, líder Yao, yo. Después de todo, no tuve problema para reunirlos a todos aquí. ¿Cree que alguien como usted podría detenerme? Si ese es el caso, ¿desea probar? —dijo la mujer, levantando un brazo hacia el escenario como una señal de invitación, sin borrar la sonrisa de su rostro.

Tras esta respuesta, el resto de la sala, algo divertida por la humillación del líder Yao, empezó a bajar las armas. Este se puso rojo y fulminó con la mirada a la mujer, pero no tuvo el valor suficiente para enfrentarse a ella, así que siguió el ejemplo de los demás, bajando su espada.

—Les recomiendo no ocupar las cinco primeras filas de la sala, aunque claro, esa es su decisión. Sé que tienen preguntas, y las contestaré después de que se hayan sentado. Así que por favor, adelante, pónganse cómodos —mencionó la mujer antes de acercarse a un costado del escenario y sentarse en una silla que nadie vio sacar.

Ante la promesa de respuestas, las personas empezaron a tomar asiento. En la parte central de la sala se ubicaron las sectas Lan, Nie, Jiang, y Jin. Se sentaron bastante cerca, aunque dejando varias butacas entre cada secta, a excepción de la secta Jin que, a falta de Jin Guangyao, seguía a Jin Ling, quien se sentó junto a su tío. Estas sectas estaban una al lado de otra, distinguiéndose por el color de sus túnicas.

Cuando todos estuvieron acomodados, la mujer volvió a hablar.

—Hola a todos, les doy nuevamente la bienvenida. Mi nombre es KaSang, así es como pueden llamarme. Sé que todos se preguntan para qué los he convocado, y es una razón bastante sencilla. Hoy les haré una revelación: les mostraré su futuro y su pasado, pero todo se enfocará en la vida de una sola persona, o mejor dicho, en el punto de vista de esa persona. Lo que hagan con la información que les voy a dar es su decisión.

Toda la sala quedó impactada tras la declaración de la mujer, y uno de ellos levantó la mano, como pidiendo permiso para hablar.

—¿Sí, líder Lan? —dijo la mujer, sonriendo al ver la educación de este.

—Me preguntaba por qué desea mostrarnos esto a nosotros. No creo que sea algo que le pase a cualquier persona. Y si nos podría decir cuánto tiempo debemos estar aquí —dijo Lan XiChen, algo inquieto, ya que había personas que no estaban en la sala y seguramente se preocuparían.

KaSang le sonrió amablemente y respondió:

—Ustedes fueron traídos de un punto específico del tiempo. Será ese mismo momento al que serán regresados, así que no deben preocuparse por los que no están aquí. Algunas personas más llegarán más adelante, y todos permanecerán aquí por un mes, o tal vez un poco menos o más, dependiendo de cómo se comporten y de cómo fluyan las cosas. ¿Y por qué decidí hacer esto? Es solo un favor a unos amigos.

Todos quedaron asombrados al ver cómo sacaba de su manga un extraño objeto cuadrado con números rojos que cambiaban.

—Es un reloj —informó ella, mirándolos divertida—. Nos ayudará a ubicarnos mejor. Por ahora, es mejor que se relajen; aún faltan algunos invitados. Llegarán en 30 minutos —dijo, mientras colocaba el reloj al borde del escenario—. Luego, podremos comenzar.


------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hola a todos, he estado avanzando con la historia pero no he publicado los capítulos, por que mi conciencia no me deja hacerlo, sin antes corregir lo que ya he publicado, espero que la trama principal no cambie(lo dudo mucho), pero si desean pueden volver a leer los capítulos conforme estos sean corregidos(se los recomiendo mucho, la trama mejorara, y ya no habrá tanta inconsistencia). espero que les guste, con mucho cariño ❤️

la "C" junto al titulo indicara los caps que ya estén corregidos 

MDZS reaccionaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora