¡Enamorame si puedes! (Moonsun)

Conversación

POV Moonbyul.

Luego de una bienvenida algo caótica creo que mis muchachos pudieron ponerse de acuerdo con lo que haríamos y comeríamos, después de todo muy amigos seremos pero resulta que son totalmente opuestos.

Xiumin: "Y yo que quería pollo frito" -sus mejillas infladas que terminaban en un puchero demostraban su descontento con la decisión de ir a cenar a un restaurante tradicional.

Nam-Joon: "Acabo de llegar del país de las frituras y no pretendo comer frituras en Corea, al menos no el primer día después de 5 años, de verdad necesito comer un kimchi decente" -Le hizo una pequeña llave y desordeno su cabello.

Xiumin: "Aish... ¡Sueeeeeeeeltaaaaameee!-Regaño mientras se soltaba del agarre de Nam y ordenaba su peinado y su ropa- "Ustedes, NIÑOS, ya no respetan a sus mayores, comeremos lo que tengamos que comer" -Dijo alternando la mirada entre Nam y yo- "Y tuu Moon Byul-Yi vas a pagar, por traer a este esperpento a mi casa y obligarme a darle alojamiento"

Moon: "Señor, si, señor" -Dije haciendo un saludo militar que le saco una carcajada a Nam y por consecuencia a mi, xiumin solo se irritaba cada vez más- "Oppaaaa... No te enojes, prometemos que Nam se portará bien, además, se fue hace cinco años. ¿Es qué acaso no lo extrañaste ni un poquito?"

Nam-Joon: "Oppaa... Será divertido pasar tiempo contigo otra vez..." -Dijo con su voz burlona y grave y xiumin reaccionó de una manera muy extraña y solo termino dándome una palmada en el brazo.

Xiumin: "Ya vámonos a comer" -Se puso una gorra y salió por la puerta con su chaqueta en la mano.

Pov Wheein.

Ya eran las 3 de la mañana y aún no podía ir a dormir un rato, sentía mis ojos algo hinchados por el sueño y los bostezos no querían dejarme tranquila. Mi cuerpo se sentía algo tieso por estár sentada las últimas 2 horas frente al computador haciendo las evoluciones de los pacientes, recetando medicamentos y leyendo las novedades de cada uno.

Salí de la estación de enfermería a estirar un poco las piernas, deje encargado el piso a una de las chicas que trabajaba conmigo y subí a la azotea del hospital, hoy estaba excepcionalmente frío y el viento no lo hacía más acogedor. Me acerque a las barandas y vi el chiste de oscuridad que se pronunciaba tenuemente en el horizonte, seul era una cuidad llena de luz y no lo digo de una buena manera, me refiero a que siempre todo estaba iluminado, tanto que muchas veces dejaban a la vista situaciones que necesitaban de la privacidad que la oscuridad podría brindarnos.

Saque una pequeña caja del bolsillo trasero de mi pantalón quirúrgico, mala idea dejarla ahí, tome el cigarrillo medio aplastado y lo puse en mi boca sintiendo casi de inmediato el sabor amargo y seco del tabaco antes de ser encendido. Busque el encendedor entre mis otros bolsillos, sin éxito, y un aire de decepción me golpeó. Arregle mi cabello con mi mano derecha tratando de liberar un poco de la frustración que estaba teniendo.

Una pequeña llama surgió a mi lado y pude identificar tenuemente un lunar bajo la ceja de mi acompañante silenciosa. Le sonreí agradecida y acerque el cigarro al mechero, dando la primera calada que tenía después de estar casi 19 horas en el hospital.

Ella de manera elegante coloco uno de sus codos en la baranda y apoyo su cabeza en su mano para mirarme de manera inquisitiva, probablemente buscando el porque de mi intromisión en este lugar.

"Ha sido un día extraño" -Comenzo con esta pequeña frase, su voz seguía siendo la misma, pero logre distinguir un toque amargo en su tono.

Wheein: "Si tú lo dices" -Di otra calada y mis hombros lograron relajarse con la exhalación del humo- "Mis días han dejado de ser buenos desde hace un tiempo" -Le comenté tratando de no sonar tan lastimera.