El profesor de leyes

Cap. 13 "Prestame tu voz"

5 años atras

El sonido de los pasos en la habitación hicieron que abriera lentamente mis ojos, el dolor comenzo a hacer presencia y con ello un gemido de dolor se escapo de mis labios. El sonido de la puerta del baño cerrandose hizo eco en la habitación, al fijarme en mis brazos pude darme cuenta que estos se veian claramente de un color oscuro y verdoso.

- La habitación ya esta pagada, asi que toma una ducha y vistete.- Escucho como la cremayera del pantalon es cerrada y mi cuerpo empieza a temblar.- Regresare tarde, pero espero que me reciban como me merzco, entendiste -

Con un silencioso asentimineto escucho la puerta cerrarse, las lagrimas comienzan a brotar de mis ojos y el mar de lagrimas no deja de salir. Este hecho era algo que siempre pasaba, el regresaba arrepentido con un ramo de flores, algun regalo caro y me pedia perdon por la noche anterior, volviamos a la normalidad y cambiaba de pronto cuando se frustraba o enojaba por su trabajo. Deje de esperar algun cambio positivo en el y simplemente me adapte a este habito. Ustedes se preguntaran el por que, bueno cuando tus padres te dan la espalada y no tienes a donde regresar, buscas la manera de poder sobrevivir. Mi cuerpo dolia tanto por los golpes de la noche anterior, intente levantarme de la cama pero eso fue un grave error.

- Mierda -

Con lentitud cai de rodillas y sentia como mi cuerpo se comenzaba a desmayar, me arrastre lentamente hasta poder llegar al telefono de la recepción y asi llamar a alguien que pudiera venir por mi.

- Recepción, se le ofrece algo -

Mi voz no sale, el dolor comienza a ser insoportable y antes de darme cuenta cai en la inconsiencia.

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Una luz reflejaba en mis ojos, la molestia del brillo hizo que mis ojos se abrieran lentamente hasta poder adaptarse a la luz. Al abrir mis ojos pude ver que el lugar era oscuro, a pesar de haber visto una luz claramente era oscuro.

-Nacido el 8 de marzo, a causa de una emoragia interna. -

El eco de esas palabras hizo que mi cuerpo se erizara, mis piernas comenzaron a moverse hacia la pequeña y tenue luz que provenia de algun lugar en la densa oscuridad.

- Al parecer traia un ser nuevo en su vientre -

Mi andar se detuvo y mis manos viajaron rápidamente a mi vientre.

- Hijo unico dentro de unos padres lamentables que quiza ni llegen al inframundo. -

Una risa tenebrosa comenzo a resonar en ese lugar, no sabia donde estaba y mucho menos que hacia aqui.

- Estas en el purgatorio o como a mí me gusta decirle, el juicio divino, aquí juzgaremos a qué lugar debes ir-

Su cuerpo se hace mas grande y puedo ver lo que realmente es.

- Haz muerto y yo juzgare tu alma -

Caigo sentado y mi cuerpo empieza a temblar, comienzo a negar y golpeo mi rostro para tratar de despertar.

- Eso es inutil, no podras regresar -

Me pongo de rodillas y comienzo a implorar por mi vida, mi llanto se hace mas fuerte y antes de rendirme escucho un suspiro.

- Te propongo un trato -

Elevo rapidamente mi rostro y mis lagrimas salian sin parar.

- Te dejare volver dado que e visto la trayectoria de tu vida y es una mierda -

El quema un papel y me mira con sus intensos ojos verdes, estos eran como una llama.

- Pero a cambio deberas entregarme otra vida -

Comienoz a asentir y antes de poder agradecerlo el sonrie.

- Y la vida que quiero es la de tu hijo -

Mi rostro se mostro en shock.

-¿Por que quisieras eso? -

El se rie groseramente y antes de darme cuenta el muestra dos jaulas en sus manos huesudas y blancas.

- no puedo darte algo y que no me des nada a cambio, debes entender que la muerte no negocea solo quita, mas sin embargo te estoy avisando que en algun momento de tu vida me llevare a tu hijo -

Comienzo a negar y antes dedarme cuenta habia despertado, me encontraba postrado en una cama de hospital, mis lagrimas comienzan a salir al recordar el eco de las palabras de la muerte. Pase demasiado tiempo cuidando y protegiendo a mi bebe, trate de no alterar a astley para que no me golpeara y no dañara la vida que llevaba conmigo. Hasta el dia que descubri su engaño.

- No tienes el maldito derecho de reclamar con quien me meto y con quien no, de todas formas tu no puedesconcebir, asi que puedo tener a los omegas necesarios para que me den un hijo digno de...-

Sus palabras se quedaron al aire, su rostro estaba girado a un costado ty mi mano tenia la lijera sensación de hormigueo. Con enojo me rei en su cara y sali del lugar, corri al aeropuerto. Ya tenia todo planeado para huir de su lado, hoy iba a tratar de darle otra oportunidad para asi arreglar las cosas, pero esto fue la gota que derramo el vaso.

-Pasajero con destino a New jearsy, favor de abordar el avión -

Y con la pequeña maleta corri a toda prisa al avión, quiza era mi error el huir de esta forma pero tenia que ser libre en algun momento. Al estar en mi asiento pude ver como los hombres de astley buscaban en todo el aeropuerto, pero ya era tarde por que jamas me encontraria y mis datos eran falsos por si queria buscarme en el sistema. Mi mano bajo rapidamente a mi vientre y comence a susurrar palabras que sabia el podia escuchar.

- Ahora iremos a un lujar donde papa no pueda encontrarnos y te aseguro que viviras de forma feliz y seras querido por mi -

Con una sonrisa melancolica acariciaba mi vientre, el tiempo paso rapidamente y mi estomago crecia y crecia hasta que llego el dia de su nacimiento.

- ¿Sabe como lo llamara? -

Al escuchar el llanto de mi bebe comienzo a reir y doy un asentimiento.

- Lantia -

Con una sonrisa miro a mi doctor y lo repito mas fuerte.

- Lantia Ineka -

y desde ese momento mi vida comenzo a ser mejor, mis dias eran mas alegres y mi cuerpo se sentia mucho mejor, el tiempo pasaba muy rapido y temia que pronto tuviera que dejarlo ir, pero nunca pense que ese momento llegara tan pronto.

- Te dije que regresaria por tu hijo -

Con lagrimas en mis ojos niego, tome a lantia de sus manos y comence a suplicar que no se lo llevara.

- Papi, lantia estara bien -

Elevo mi rostro y miro los ojos inocentes de mi hijo.

- Fuiste el mejor papa que lantia pudo tener y papi no es malo, solo que fue engañado para asi lastimarnos -

Su manita toco mi mejilla derecha y mis lagrimas salieron mas rapido.

- Lantia tiene que irse, es momento de que me dejes ir -

Con lagrimas en mis ojos beso su manita y la suelto lentgamente, el toma la mano de la muerte quien vestia de sus densos colores negros y comenzaron a caminar alejandose lentamente de mi.

- No te lo lleves, aun es un niño -

Y con esas palabras repitiendose en mi cabeza trate de negar el hecho de que cuando despertara mi alegria ya no estaria en mi vida, tenia que aceptar la realida y esa era... que mi hijo no volveria conmigo.