1. TLÁLOC VS CIPACTLI

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*acciones*

_pensamientos_

(Una que otra aclaración)


 *En el principio de un universo, sólo existía el mar, donde había un único habitante. Cipactli, la llamaron los hijos de los señores de la dualidad, una bestia que era temida tanto por dioses cómo por los primigenios. Si aspecto era monstruoso, mitad cocodrilo, y mitad pez, descomunalmente gigante. . . Tenía dieciocho cuerpos y dieciocho bocas que rugían sacando sus lenguas de luz y energía. Esas lenguas fueron su principal defensa, impenetrable, y letal. Uno de los hijos de la dualidad bajó valientemente, decidido a quitarle esa arma. . .*


Tlaloc: bien. . . *Asomado desde las nubes* cómo podré quitarle esa luz de su lengua?. . . *Rascando un colmillo de su máscara*

Quetzalcóatl: no estarás pensando en ir ahí. Sabes que no siquiera el señor Pontos permite que alguien se acerque. . .

Tlaloc: ya hablé con él. . . Y aceptó 

Quetzalcóatl: . . . Estás seguro de esto?

Tlaloc: hermano, ya faltan pocos días para el cumpleaños de mis pequeños~ *acaricia una nube* no puedo celebrarlo sin un buen regalo~ *respira ondo* aquí voy. . . *Se deja caer de las nubes cayendo de la tierra*


*La caída fue larga y rápida. . . Y su cuerpo sólo sintió el impacto del agua, y cómo se sumergía lentamente por el agua. . . No parecía haber nada* 

Tlaloc: _que raro . . . Parece que no está por está zona el día de hoy . . ._ *nada más profundo. . . Sin notar que un ojo más grande que él lo veía*


*Pero antes de darse cuenta el ojo se cerró, y el agua se movió. Tlaloc tomó eso cómo mala señal, y se apresuró a salir de la superficie e ir a una zona elevada. Pero cuando estaba ya en el cielo. . . El monstruo se lanzó a su encuentro.*

*Su hocico de cocodrilo, pudo tocar las nubes y la superficie del agua con sólo abrirla un poco, el señor de la lluvia corrió a las alturas salvandose de una mordida que lo mataría. . . Pero en su trayecto pudo ver esa lengua*


Tlaloc: bingo! *Cae de nuevo, pero ahora caminando sobre el agua* vamos a ver qué es lo que tienes para mí, monstruo!!! 


*La feroz criatura en un rugido lanzó esa luz hacía él, tlaloc intentó pararlo con sus brazos, pero la luz cambió de trayectoria y lo impactó por la espalda, lanzandolo lejos*


Tlaloc: Agh!!! *Para el impacto* maldita sea. . . *Mira a Cipactli* 


*El caimán seguía en guardia. . . Y al abrir la boca, la luz se esparció por toda el lagua, dando de lleno a Tlaloc*


Tlaloc: AHHHH!!!! *Cae de rodillas* ngghhh!! *Se levanta con pesar* 


*Con su presa ya preparada, Cipactli nadó a toda velocidad para comerlo de un mordisco. Pero cuando se lanzó a él, por reflejo se apartó, pero ahora a una velocidad que jamás había sentido, salvando su propio pellejo*


Tlaloc: wow!. . . *Mira que de sus pies salían chispas de esa luz* . . . *Mira a la bestia, y vuelve a correr a una velocidad atroz* veamos si eres inmune a tu Luz!! *Salta sobre su cabeza, y al golpearlo, la lus apareció de su mano e impactó con gran fuerza en la cabeza de la bestia, haciendo que su rugido se escuche hasta lo más alto*


*De inmediato se alejó de ahí, sentía su poder crecer. . . Pero se estaba acabando esa luz. Necesitaba más. Entonces decidido volvió a correr hacia el monstruo, y este respondió, abriendo su boca para el segundo disparo*


Tlaloc: te tengo *saca una daga y salta a su hocico*



*Silencio. . . Pero después un estruendo y un rugido ahogado se escucharon, viéndose a la bestia sangrar de cada boca, y tlaloc en su mano, muchas luces que eran sus lenguas, serpeantes e inquietas*


Tlaloc: veamos que tan bien puedo controlar tu poder. . . *Mira las luces* . . . Tlapetlanti (rayo en náhuatl) . . . Ese será su nombre *se lleva las luces a la boca*


*Al momento de meter esas luces, un nuevo poder obtuvo el señor de las lluvias, un poder que se disparó a las nubes, y una tormenta comenzaría*


Tlaloc: jejeje~ . . . Feliz cumpleaños niños~ *se prepara para atacar* fue un placer, ahora déjame darte unos golpes~ *sale disparado golpeando a Cipactli* 


*Todo el reino celestial pudo verlo. Pudieron ver con sus propios ojos cómo ese maldito monstruo salió volando por los aires después de impacto, para ver cientos y miles de luces golpearlo repetidas veces (cómo el plasma relámpago de Aioria de Leo, de los caballeros del zodiaco) la luz era tan intensa, que al aumentar los golpes de velocidad, los destellos los cegaron cada vez más hasta no ver nada. . . Para después escuchar un último y gran impacto, y así, Tlaloc subió victorioso por su logro. . . Pero la bestia aún seguía viva. . . Pero muy lastimada, y sin su mejor arma, ahora podían acabar con ella. . .*


Weno, está es el primer mito de cómo tlaloc obtuvo el rayo macizamente sin miedo al éxito B)

Y bueno, espero y les haya gustado, sin más dilación, me despido, y hasta el próximo capítulo 


Un pequeño memesito para la audiencia ^^

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Un pequeño memesito para la audiencia ^^

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