02

1.2K 176 38
                                    

El sonido de alguien tocando la puerta hizo que dejara lo que estaba haciendo. 

—Adelante —Dijo Gordis permitiendo que el que estaba en el otro lado de la puerta pudiese abrirla. 

Al ver que era nada mas ni menos que de Achuchones le dio la bienvenida con una cálida sonrisa.

—Que nueva excusa te inventaste para que el sargento Caricias te deje venir aquí? 

Gordis sonría de forma divertida, sabia que Achuchones se inventaba varias excusas para ir al hospital pero solamente visitarlo, adoraba su compañía si pero no le agradaba el hecho de que el turquesa se saltase las horas de entrenamiento solo por visitarlo y ya le había regañado repetidas veces sobre eso. 

—Ahora un paciente herido no puede venir aquí para que lo atiendan? —Pregunto Achuchones con un tono coqueto mientras se subía la manga para mostrar su herida, que solamente era un pequeño rasguño en el codo.

Gordi soltó una pequeña carcajada causando que el corazón de Achuchones se derrita por completo. 

—Esta bien, siéntate ahora traigo una pomada. 

Achuchones obedeció y se sentó mientras observaba a Gordi abrir un cajón y agarrar de ahí una pomada anti-bacteriana. No se arrepentía cuantas excusas o mentiras le había dicho al sargento Caricias, haría cualquier cosa con tan solo ver a Gordi, incluso se hacia pequeñas heridas a propósito. 

— Ya esta — Dijo Gordi después de haber puesto la pomada. 

— Gracias Gordi, Corazón mimoso para ti! — Dijo entusiasmado mientras sus dedos hacían la forma de un corazón. 

—Corazón mimoso para ti también. 

La sonrisa de Gordi se borro y seguido soltó un suspiro, Achuchones lo miro confuso ante al repentino cambio de humor. 

—Ocurre algo?

—Achuchones ya hemos hablado de esto, no puedes saltarte tus entrenamientos. — Respondió con tono algo cansado ya que siempre se lo decía muchas veces y el otro no le hacia caso. — Y se que te haces pequeñas heridas como estas. 

—Y como puedo ir a verte? —Pregunto haciendo un puchero. 

Gordi se cruzo de brazos pensando en que buen momento podía el turquesa visitarlo. 

—Ya lo tengo! Puedes visitarme a la hora del almuerzo. 

—Eh? Pero no puedo, desde que ocurrió la guerra de comida ahora nos vigilan mientras comemos.  

—Es una pena, pues en la cafetería tenemos, tartas, bocadillos, donuts-

—TENÉIS ESAS DELICIAS?! AHORA EN ADELANTE VOY A IR ESA HORA!

—Bien ahora que ya hemos aclarado las cosas debes irte. 

—QUE?! Ya quieres que me valla?!

—Quieres que el sargento venga a recogerte?

 —Cinco minutos mas!— Suplico poniendo ojos de cachorrito.

—Eres lindo pero te dijo que ese método no funciona conmigo. — Comento Gordi cruzándose de brazos y a mirar a otro lado. 

 Las mejillas de Achuchones se tiñeron de rojo, Gordi piensa que es lindo! Bueno, el mismo sabia que lo era, pero que Gordi le dijese eso hacia que su corazón latiese cien por hora. Osea quien no se ilusionaría que su crush le dijese que es lindo? 

—Esta bien, esta bien me voy! 

.

—Estoy de vuelta!

—Achuchones donde has estado?! — Pregunto Pandi con cierta preocupación—Has tardado tanto que el sargento Caricias estuvo a punto de ir a buscarte!

—Oh! Es que hubo un gran problema en los pasillos y tuvieron que llamar a muchos enfermeros y doctores a resolverlo. —Respondió algo nervioso.  

—Mañana vas hacer tres horas mas de entrenamiento por saltarte esta! —Exclamo el Sargento. 

Achuchones solamente hizo un puchero, pero eso no importaba! Después de tantos meses de tortura metiéndose a la boca garzas asquerosas mañana comerá comida deliciosa! Y aun mejor, junto con Gordi!

Sana mi corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora