Comportamiento antideportivo

No quiero incendiar el mundo

— Che Paulo ya me vas a decir que le pasó - pregunta Julián mientras se acuesta en la cama del beta esperando que esté le cuente el chisme, prácticamente le había llenado el WhatsApp de mensajes hasta despertarlo-

— Lío dice que ese tal Ochoa lo marco lo dejo y ahora lo ignora, si vieras a Lio está hecho un mar de lágrimas -dijo el beta acomodándose al lado de Julián y abrazándolo mientras hunde su rostro en el cuello de este-

— Como así, entonces ahora Lionel es un Omega marcado? Un momento para eso tuvieron que haber...oh cielos... - Julián con su imaginación volátil ya veía en su mente a su amigo debajo de aquel alfa mexicano, sus mejillas se calentaron de la vergüenza al pensar esas cosas-

— Quiero llevarlo a México después de acabar esto, ganemos o no debemos ayudarle a arreglar esto, vos sabes lo perjudicial que puede ser para la reputación de Lio que se enteren que lo marcaron, se pondrán a averiguar y cuando den con el culpable se hará un escándalo horrible...lo que me preocupa es si usaron protección

-asi pasaron las horas, ese día no tenían partido podrían descansar o en todo caso ir a la habitación de Lio a consolarlo, y eso hicieron al entrar lo vieron dormido con el teléfono en mano, Julián se acerca a el y le arrebata el teléfono con cuidado a lo cual al sentir el movimiento el Omega se levanta de golpe y se asusta al ver a sus amigos-

—Que hacen acá - pregunta un adormilado Messi mientras pone el celular en la cama y restriega sus hinchados ojos, había estado llorando, eso era obvio-

— Vinimos a hacerte compañía

— Y a ver que no te suicides - dijo Julián mientras se sentaba al lado del Omega y le abraza por los hombros- llorar no es lo tuyo, parece que te hubieran revolcado en el suelo te vez horrible

-un zape se escuchó en la habitación y era Paulo dándole uno a Julián por decir aquello-

— Venimos a animarlo no a decirle que se ve fatal, eso el ya lo sabe

— Pueden dejarme solo? Si quieren animarme no lo están haciendo... -la voz de Lío era bajita y apagada, agradecía la visita de sus amigos, necesitaba distraerse por que estando solo el suicidio no sonaba tan mal en su mente-

— perdón, pero Juli y yo vinimos a llevarte a comer, no has salido de la habitación, vamos comemos tomamos algo y luego regresamos

- Después de mucho ruego Julián y Paulo lograron sacar a Messi de su cuarto y llevarlo a donde creían sería un buen lugar: un bar de strippers-

°°∞°°∞°°∞°°∞°°∞°°∞°°∞

  - Un equipo derrotado había llegado a México, todos estaban felices de ver a sus familias pero a la vez estaban tristes por verlos tan pronto, era una sensación agridulce, pero a pesar de ello la afición los recibos con aplausos y gritos

Estaban en casa.

— Memo... - un arrepentido Kevin tocó el hombro del alfa haciendo que este se voltee- quería pedirte perdón, yo sé que lo que dije estaba mal, lo siento de verdad...es tu Omega no debí insultarlo así

- Guillermo escucha la disculpa de Kevin y lo atrae en un fuerte abrazo- No importa, se que a veces dices cualquier mamada, no te disculpes

— gracias Memo, a modo de disculpas quería invitarte a mi casa a Colima, creo que relajarte te hará bien, puedes traer a tu hija total también llamaré a Diego y Javi y ella adora jugar con el perro de Diego será divertido como los viejos tiempos

— que haría sin ustedes, solo dile a Javi que irá Lucciana, no quiero que ese chico aparezca allí con bailarinas y licor -dice con una media sonrisa, sabía de lo que era capaz el chicharito, y también sabía que Lucciana era una excusa para que Diego vaya, Kevin estaba enamorado de un chico al cual solo le importaba su perro-

°∞°∞°∞°∞°∞°∞°∞°

— Eh eh eh!! -un ebrio Paulo sostenía a Julián de la cintura mientras éste bebía whisky directo de la botella, y a su lado estaba Lío, no había acabado ni su cerveza y trataba de quitarle la botella a Julián, un taxi ya los esperaba afuera, como pudo jalo a la pareja hasta la puerta del bar, con lo que no contaba es que Paulo y Julián empezarían a pelear faltando casi dos metros para llegar al taxi-

— Sos un pelotudo! Me traes acá y no dejas de ver pibes -El Omega reclama al beta-

— Vos y yo no somos nada, déjame a mi mirar a los pibes que quiera que no sos mi dueño!

— Chicos vamos! Están grabando - Un avergonzado Lío jalaba a Julián sin éxito, hasta el taxista se había bajado a grabar, una discusión de pareja protagonizada por dos futbolistas era algo que no se podía olvidar-

— No te metas Lío y que saquen video, que sepan que Paulo solo quiere coger y le tiene miedo al compromiso! Que no toma a las personas en serio!

— No digas boludeces Juli, vos fuiste el primero en decir que no querías compromisos - estaba un poco menos ebrio que Julián, así que ayudando a Lío metió a Julián al taxi en el asiento delantero y le abrocha el cinturón, sentía los flashes de los celulares sobre el, Lío ya se había metido al taxi así que fue tras el sentándose a su lado, cerro la puerta con fuerza y subió la ventanilla, una ventanilla transparente no lo cubría de los flashes-

— Son unos pelotudos... -Lio ya iba a reclamar cuando en el asiento delantero Julián vómito por la ventanilla- che vos métete al taxi y arranca pelotudo -le grita al taxista que seguía grabando y ante el reclamo entre risas guardo su teléfono y se metió al coche acelerando-

Al día siguiente

-El teléfono de Messi sono bastante fuerte en la habitación, un desvelado y cansado Messi lo contesto, ya no esperaba la llama de Guille, acepto aquella videollamada y una cálida voz resono y un sonriente rostro apareció en la pantalla del argentino-

— Hola meu amigo...