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POV ALEX:

—Nos vemos mañana chicas! - Dije moviendo mi brazo mientras caminaba al auto

Luego de cruzarme con Niall  y  Jourdan en el restaurante las cosas se mantuvieron tranquilas, las chicas no dejaban de hablar sobre el concierto y yo sentía mi ansiedad crecer

Entre al auto y luego de saludar al chofer analice mi día de hoy, quiero recuperar la amistad que tenía con Emma y Margot. Eran las 17:30 y debía estar en los establos a las 18 para mi clase de equitación

La equitación era la mayor fuente de alegria en mi vida, amaba mis caballos, tenia más de 12, todos fueron obsequios de otras familias reales

Llegue a los establos y luego de un rápido cambio de ropa ya estaba cepillando el lomo de Helmek, el más viejo de mis caballos, había sido el ultimo obsequio de mi madre

—Veo que ya esta lista su Alteza - Dijo Ed apareciendo

—Así es! - Dije sonriendo - Que te paso? - pregunte alarmada notando su cojear en la pierna izquierda

—Ayer caí de Sunshine- dijo con un intento de sonrisa, Sunshine era la más joven, aún no estaba correctamente domesticada...para ser sinceros se parecía bastante a mi

—Y estás bien? - Pregunte preocupada- Necesitas algo?

—Si, no hay huesos partidos -Dijo agitando sus brazos como si se trata de una celebración -Solo que no creo ser capaz de montar hoy

Mi cara debió ser lo suficientemente expresiva para que Ed rápidamente encontrara una alternativa para no suspender la clase de hoy

—Stephan volvió hoy de su internando en Escocía! - Dijo el - El puede darle la lección de hoy, si está de acuerdo claro

Normalmente un cambio de personal traería consigo un gran número de burocracias y papeleo, pero Hector y su Hijo llevaban más tiempo trabajando con los caballos de mi familia que yo de vida, así que no me pareció necesario informar la alteración

—Si no es mucho problema - Dije - No quiero incomodar

—Nunca incomoda su Alteza- Dijo el - Ire por Stephan - Informó saliendo de los establos

Me quede junto los caballos en silencio, no se cuando fue la ultima vez que vi a Stephan, de pequeños éramos amigos, durante mis clases el acompañaba a su padre y luego merendábamos juntos, como era de esperarse comenzamos a crecer y nuestra relación cambió, el entro en esa etapa en la que piensan que todas las niñas tienen piojos y yo en la etapa donde todos los niños comen sus propios mocos

Lo último que supe sobre el fue que reprobó el 10° año en el colegio, motivo por el cual Hector lo envió
a un internado solo para hombres en Escocia

—Princesita - Dijo alguien sacándome de mis pensamientos

—Pero si es el mayor bandido de todo Londres! - Dije alegre bromeando

Este no era el Stephan que yo recordaba...el que yo recordaba era mucho más delgado, con un cabello bastante largo, algo de acné juvenil y solo un par de centímetros más alto que yo...este tenía un porte mucho mayor, hombros largos y brazos musculados sin hablar de la clara diferencia de alturas

—Así es! Estoy de vuelta! - Dijo abrazándome

—Estoy tan feliz de verte! - Dije - Pero agradecería si me volvieras a colocar en el suelo - Pedi

—Lo siento - Dijo el riendo colocándome de nuevo en el suelo - Supongo que ahora te debo llamar de "Su Alteza" - Dijo con un extraño acento

Cuando éramos pequeños Stephan me llamaba por mi nombre, sin ningún tipo de tratamiento especial, éramos niños, inclusive me llamaba "princesita" como una especie de burla

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