Gojo había deseado ese momento, desde lo más profundo de su ser, sólo que en ese momento, ni él mismo lo sabía.
El beso continuaba de la misma manera; demandante y de ciertaforma un tanto desesperado de parte de Gojo, quien apenas daba tiempo de respirar.
Definitivamente ambos se estaban dejando llevar demasiado, pero, después de un tiempo se separaron por la falta de aire.
-Sukuna- Dijo Gojo, mientras pegaba sus frentes. Logro ver un pequeño sonrojo en Sukuna; sin mencionar un fino hilo de saliva que aún los unía y esa vista definitivamente era la mejor para Gojo.
Estaban por volver a unir sus labios cuando el teléfono de Sukuna sonó y este rápidamente lo tomó.
-Hola Yuuji, ¿sucede algo? - Preguntó.
-Bueno, mi amigo tuvo que salir con mucha urgencia, así que ya estoy de camino a casa. Sólo quería avisarte por cualquier cosa.
-Está bien, te espero pronto. Y Yuuji, por favor cuídate de camino a casa, ¿si?
-No te preocupes, Sukuna-Dijo este, con una pequeña sonrisa.
- En un rato llego- Terminó se decir Yuuji, para colgar la llamada.Sin duda alguna, aquella llamada había salvado a Sukuna.
Y estaba vez no se dejaria llevar de nuevo, y mucho menos por esa rata albina.-Ya que terminamos el trabajo, deberías regresar a tu casa, Gojo- Dijo Sukuna, desesperado porque se fuera.
Aún no estaba asimilando lo que había pasado y sobre todo le molestaba mucho el hecho de no haberse alejado antes.Gojo Sonrió- Tienes razón, ya es tarde. Entonces hasta luego.
El albino tomó sus cosas y camino a la salida, pero con la misma regreso hacía Sukuna y lo beso nuevamente.
Y de nueva cuenta, Sukuna se dejo llevar un poco, después de haberse propuesto no volver a hacerlo...
Estaba vez no fue un beso largo, pero si se había mostrado cierto deseo de parte de ambos.Después del beso, Gojo se despidió con una enorme sonrisa, y Sukuna sólo podía estar con la cara totalmente roja, sin saber si era por furia o porque se había sonrojado.
Finalmente Gojo Satoru, se había ido y Sukuna estaba un poco más tranquilo. Luego de un tiempo más regreso Yuuji, lo que terminó de tranquilizar a Sukuna.
Mas, la tranquilidad no duro por mucho. Después de ese día, Gojo, era mucho más apegado a él, cosa que a Sukuna, le molestaba y uno de esos días finalmente lo enfrento en el salón de clases vacío.
-¡Ya deja de ser tan malditamente apegado, Gojo! ¿Qué te pasa ahora?
Gojo, lo acorralo contra la pared y se acerco peligrosamente a él, uniendo sus labios rápidamente-Sukuna, puede que para ti no significan nada los besos que nos hemos dado, pero para mí sí. -Confesó, Gojo, al separar sus labios de los contrarios.
Sukuna se le quedo mirando de una forma indescriptible, una mirada que Gojo, aunque quizo esforzarse en entender no pudo.
Hola, ¿cómo están?
Yo la verdad espero que estén muy bien, y que de igual forma todo en sus vidas lo esté.
Bueno, me perdí por un chingo de tiempo, pero he vuelto con un capítulo probablemente de lo peor, una ortografía terrible y un separador que parece hecho por un niño pequeño...
Cuídense y tomen awita.
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Me gustas alfa
FanfictionGojo no quiere una relación seria, pero eso cambia cuando conoce a Ryomen Sukuna. ☆[En esta historia las maldiciones no existen, solo son humanos normales sin energía maldita. Los personajes obviamente no me pertenece, son creación hermosa de Gege...