Daini Batan | OsaSuna

Parte Uno.

一 ¡Chicos, acérquense! Les tomaré una foto.

Osamu asintió y se acercó a sus compañeros de club, la atmósfera del lugar era melancólica y las miradas tristes de sus kōhais hacían más deprimente el momento. Kosaku, Atsumu, Gin, Suna y él se pusieron de pie uno al lado del otro y miraron hacia el frente.

Su manager sonrió con orgullo y levantó su pulgar. 一 A la cuenta de tres dicen queso. Uno, dos y...

Los cinco chicos sonrieron y levantaron sus diplomas de graduación con orgullo.

一 ¡Tres!

一 ¡Queso!

El flash de la cámara fue lo siguiente que vieron, sus kōhais los felicitaron y después de unos minutos les entregaron un tablón con mensajes de felicitación por su graduación.

一 Esto es más deprimente de lo que esperaba. 一murmuró a su lado Suna.

Osamu lo miró y asintió. 一 Las despedidas son deprimentes.

Suna a su lado asintió y sonrió.

Pareciera que fuera ayer cuando ingresaron a la preparatoria y cruzaron las puertas del club de voleibol. Osamu aún recuerda cada una de las presentaciones de sus compañeros, no era consciente de lo rápido que había pasado el tiempo,hasta ahora; verlos ahora con sus diplomas en mano mientras se despedían de cada uno de los miembros del club lo hacía sentirse orgulloso... y triste.

Después de agradecer las felicitaciones salió del gimnasio, despeinó ligeramente su cabello, sabía que debía de buscar a Atsumu, quien se retiró primero y seguramente se encontraba rodeado de chicas que lo despedían entre lágrimas. Camino con cansancio por el patio de la escuela, encontrándose con una escena un poco vergonzosa.

A unos metros de él se encontraba Suna acompañado de una chica, parecía que estaban platicando de algo importante o eso supuso Osamu al ver el claro nerviosismo de su compañera de clase.

Sonrió, más tarde molestaría a Suna. A punto de darse la vuelta y seguir en busca de su hermano, la mirada de Rintarō se encontró con la suya. La sorpresa fue inevitable para ambos, Osamu quiso salir huyendo pero la mirada penetrante de Suna sobre él ocasionó que se mantuviera en su sitio, unos segundos después vio cómo el chico se despedía de su compañera de clases y comenzaba a acercarse a él.

一 No sabía que tu nuevo hobby era espiar a las personas, Osamu.

一 Cierra la boca 一murmuró一. Estoy buscando a Tsumu, no quería interrumpir tu momento solo estaba de paso.

Su relación con Suna era algo complicada de describir. Se conocieron gracias al club de voleibol y a las pocas semanas se convirtió en alguien especial para los gemelos Miya en especial para Osamu; ambos chicos solían pasar demasiado tiempo juntos y era divertido, sobre todo cuando se unían y molestaban a Atsumu. Sin embargo, Osamu estaba casi seguro de que durante el tiempo que pasaban juntos habían ciertas señales que claramente se podían malinterpretar; como cuando sus miradas se cruzaban y alguno de los dos guiñaba el ojo acompañado de una sonrisa coqueta, ocasionando que él otro se sonrojara o esos momentos donde la mano de uno se apoyaba sobre el muslo del otro dando ligeros masajes y por supuesto, Osamu no olvida aquellas veces que sus labios quedaban a escasos centímetros de distancia mientras se miraban intensamente.

Su relación con Suna era complicada pero era especial y ambos lo sabían, solo que ninguno decía algo al respecto.

El chico a su lado rió mientras susurraba algo y tomó asiento en el césped sin importarle ensuciar su uniforme. 一 Atsumu está cerca de la entrada principal, aún si lo encontraras te sería imposible llevartelo ya que está rodeado de sus fanáticas mientras gritan al unísono "Atsumu-kun, ¿Puedo tener tu daini batan?"