Después del éxito de la celebración de la diversidad y el amor, Balto y Kodi se sintieron más unidos que nunca. Pasaron un tiempo disfrutando de su amor y apoyándose mutuamente en todo lo que necesitaban. Pero un día, Kodi sorprendió a Balto con una noticia que cambiaría sus vidas para siempre.
Balto, tengo algo importante que decirte -dijo Kodi, mirándolo a los ojos con una sonrisa nerviosa en su rostro.
¿Qué pasa, Kodi? -preguntó Balto, intrigado.
Quiero que seamos papás -dijo Kodi, esperando la reacción de Balto.
Balto se quedó sin palabras por un momento. La idea de ser padres era algo que nunca había imaginado, pero cuando lo pensó mejor, se dio cuenta de que era algo que quería más que nada en el mundo.
Sí, por supuesto! -dijo Balto emocionado, abrazando a Kodi con fuerza.
Kodi se rió y lo abrazó de vuelta, sintiendo que su amor se hacía aún más fuerte con la idea de tener un nuevo miembro en la familia.
Poco tiempo después, Kodi quedó embarazado. Los días pasaron llenos de amor y emoción, y Balto y Kodi se prepararon para la llegada de su bebé. Compraron ropa, juguetes y prepararon la habitación más hermosa que pudieron imaginar. Estaban ansiosos por ver la carita de su hijo o hija
Finalmente, llegó el día del nacimiento. Balto y Kodi se tomaron de las manos, esperando con ansias el momento en que conocerían a su bebé. Y cuando lo hicieron, sus corazones se llenaron de amor infinito.
Era un pequeño cachorro, hermoso y perfecto. Balto y Kodi lo tomaron en sus brazos, sintiendo la felicidad más grande que habían experimentado en sus vidas.
Hola, pequeño -dijo Balto, mirando a su hijo con ternura- Te amamos mucho.
Kodi sonrió, acariciando la cabeza del cachorro con suavidad.
Bienvenido a la familia, mi amor -dijo Kodi con una sonrisa en el rostro.
Y así, la familia de Balto y Kodi creció aún más, llena de amor y felicidad. Sabían que no todo sería fácil, pero estaban dispuestos a enfrentar cualquier desafío juntos, sabiendo que el amor que compartían era lo más importante en sus vidas.
