Capítulo uno.

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"Oi, Midoriya, ¿cómo están todos?" El peliverde brincó un poco en su lugar luego de escuchar la nada melodiosa voz del rubio con el rayito teñido, era inusual que él le hablase, sobretodo sabiendo que Shinso era su amigo incluso luego de su terrible decisión acerca de su pareja. No lo malentiendan, Izuku nada tenía en contra de Kaminari ni del Bakusquad pero sabía que en ese preciso momento su propio grupo de amigos no eran del agrado de los amigos del rubio.

La sonrisa de Denki estaba a nada de flaquear y mostrarse igual de arisco que Bakugo cuando le contó lo que su innombrable le había hecho. Pero su curiosidad era demasiada, necesitaba saber qué había sido de Shinso... algo dentro de él quería creer que había un poco de arrepentimiento dentro de su corazón.

"Kaminari, ho-hola... Bien, ya sabes... todos estamos entrenando y buscando ser mejores héroes, lo normal, supongo... ¿cómo estás tú? ¿Necesitas algo?" Deku - como Bakugo lo llamaba - se veía demasiado nervioso y Denki no lo podía culpar, claro que sabía que la clase había tenido momentos tensos desde su rompimiento con Shinso, porque aunque el solecito de la clase era Kirishima, todos tenían un particular cariño por Kaminari y su bobo sentido del humor, así que en realidad todos habían visto con malos ojos al pelimorado recién transferido a la 2-A.

Denki mantuvo su sonrisa y creyó que por ahora era más que suficiente, no podría sacar mucho de Deku realmente, era demasiado fiel a sus amigos, por mucho que también se hubiese molestado con Shinso por haber traicionado la confianza de Kaminari. Se despidió de él y siguió su camino hacia su dormitorio.

...

No pueden culparlo... bueno sí, pero no quiere que lo hagan.

Su relación con Shinso había sido corta, un par de meses a lo mucho, pero en esos días realmente habían compartido muchas cosas, además fueron amigos por mucho más tiempo antes de volverse pareja por lo que se habían mostrado muchos de sus sitios favoritos - ventajas de que Shinso fuera el hijo adoptivo de Aizawa y Present Mic y que estos los dejasen salir de la UA dentro de los horarios donde no podían salir - y ese Cat Café le parecía demasiado adorable... si por casualidad se daba ver a Shinso junto a Eri o solo pues sería cosa del destino...

Denki quería cambiar su nombre a Destino.

Moría por verlo y que pareciera casualidad porque definitivamente no quería hablar con él. ¿Han escuchado la expresión en inglés Falling in love? Pues definitivamente Denki se había caído y se había ido de boca sin meter las manitas. Le dolía demasiado la forma en la que terminaron, pues le extrañaba.

No iba a perdonar nunca a Shinso pero su corazoncito de pollo rogaba por verlo más allá de las clases donde un sobreprotector Bakugo impedía que compartieran más oxígeno del necesario... Necesitaba ver sus ojos, quería ver un poco de arrepentimiento y saber que era feliz con Monoma pese a haber tenido una relación demasiado turbulenta antes de que ellos comenzaran a salir.

Denki quería y no quería verlo.

Pero otra vez había fracasado.

...

Okay, debió suponer que el contacto cero no era plausible en su caso cuando su ex novio era el alumno nuevo en su clase y su maestro pareciera tener un retorcido sentido del humor para juntarlos en pareja para un trabajo en equipo.

Cancelen la torre de rascar para gatos que había estado planeando comprarle a Aizawa, no se la merecía.

El punto es que Denki estaba a nada del colapso, pues cada notificación de su celular podía ser el mensaje que Shinso prometió enviarle para ponerse de acuerdo con el dichoso trabajo sobre las leyes que debían seguir los héroes en sociedad.

¿De dónde sacas eso?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora