siempre tú.

capitulo 53

Pdv Jungkook.

Cuando tenía díez años mi madre nos dejó a mi hermana y a mi un rato solos en casa por una hora, éramos lo suficientemente grandes, asi que apenas la puerta se cerró, corrimos a comer golosinas, después encendimos la televisión y la pusimos a todo volumen, creímos que en ése tiempo podíamos hacer los que queríamos, con ese pensamiento de "libertad "fuimos y saltamos sobre nuestras camas, pero entonces Lisa tomó una almohada y comenzó a golpearme así que yo hice lo mismo.

Cuando eres pequeño no mides las consecuencias de tus actos, así que jamás pude preveer que uno de esos golpes, ella pisaría el borde del colchón, tropezaria y se abriría la cabeza con la esquina de un mueble, jamás habría imaginado que ella caería inconsciente y que yo la creería muerta.

Por un momento sentí un terror indescriptible viendo a mi hermana en el suelo, con los ojos cerrados, sin ningún adulto cerca que pudiera socorrerme, estaba estático, casi un minuto después recordé que debía llamar a emergencias y después a mi madre para decirle lo que había ocurrido, ese miedo que me oprimió el corazón nunca voy a olvidarlo, fue un miedo intenso , desbordante, enloquecedor, casi igual al que sentí el día de mi operación, justo después de colgar la llamada con Minie,  le dije que lo amaba y pude escuchar la sonrisa en su voz cuando contestó:

__Te amo Kook.

Pero justo después de presionar para colgar simplemente me desconecte , mi mente comenzó a vagar por las posibilidades  que tenía de que algo saliera mal,¿ y sin no despertaba? ¿y si algo salía mal mientras me operaban? ¿Y si no volvía a ver a jimin?.

El miedo es poderoso, es capaz de frenarte e impedir que avances, tuve miedo ese día cuando tenía diez años cuando creí que Lisa podría no volver a despertar, tuve miedo el día de mi cirugía al pensar que yo podría no despertar y senti terror al pensar en la posibilidad de no volver a ver a Jimin, de no poder redimir todo el daño que le causé, esa inseguridad que le hice sentir alguna vez, haciéndolo creer que no era suficiente, cuando en realidad era yo quién no quería aceptar que él me gustaba más que un amigo, le hice demasiado daño y no me alcanzará la vida para compensarlo.

Tuve tanto miedo , que los doctores tuvieron que pedirme que me relajara antes de ponerme la anestesia, tuve miedo cuando me pidieron que contara hasta diez hasta caer dormido y tuve miedo también cuando desperté.

Los días que le siguieron a la operación estuve ansioso, desesperado por ver a mi novio y hasta ahora no puedo quitarme la sensación de encima.

Pero cuando  lo veo cruzar el umbral de la puerta con el semblante preocupado, nunca antes me sentí tan aliviado, es abrumador y cuando sus ojos se llenan de amor y sonríe, me siento agradecido, cuando él se acerca a mí , me acaricia el rostro , su cercanía me calienta el pecho y me siento en casa, siento que estoy con quién debería estar, solo sé .... que quiero sentirme así siempre.

Ya no quiero sentir ése miedo a perderlo o a meter la pata cómo solía hacerlo, solo quiero tener la certeza de que él estará siempre conmigo y darle también  esa seguridad de que lo nuestro es para siempre, que nosotros no tenemos final.

Así que cuando él me observa haciendo una mueca y borra las lágrimas de mis pestañas mientras me pregunta.

__Kook ¿que pasa, ¿que está mal?.

Yo solo tomo sus manos, las beso y mirándolo a los ojos le pregunto.

___ Te casarías  conmigo?.

Mi voz está ronca por la operación , pero se entiende con claridad y por la mirada que me lanza tras escucharme, ya se la respuesta antes que abra la boca.