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• Iveth •

Issabela: no se te vaya a ocurrir aventarme agua desgraciada

Iveth: entonces a que vienes al mar?

Issabela: a verlo nomás y a ver morritos

Iveth: jajaja eso que issa

Disfrutamos del mar todo el día, regresamos al hotel aproximadamente a las 7 de la noche para arreglarnos e ir a algún antro

Issabela: A la madre sigo sin entender porque nos dieron esta suite

Iveth: Y esas rosas?

Había un ramo gigantesco de rosas en la nueva habitación que nos habían dado

Issabela: seguramente te las mandó tu papá

Iveth: Issa si mi papá hubiera mandado algo serían 2 ramos, sabes que no te dejaría sin regalo

Issabela: pues mi papá tampoco, y tarjeta no tienen

Iveth: de seguro se equivocaron otra vez

Issabela: Ya me está oliendo raro esto

Iveth: cállate deja hablo a recepción

Llamé y solo me dijeron que habían dicho que eran para está habitación pero no habían dejado ni tarjeta ni nada, dimos por visto el tema aunque no podíamos dejar de admirar lo hermosas que eran esas rosas, nos arreglamos y salimos a un antro, estábamos tratando de convivir pero fracasamos muchas veces, hasta que nos hicimos amigas de un muchacho llamado Octavio y una muchacha llamada Danna, nos llevamos muy bien y cada vez el ambiente se ponía mejor, pedíamos botellas y se acababan muy rápido, realmente íbamos a salir super mal de aquí, me quedé solo con Octavio en lo que las niñas fueron al baño y en tan poco tiempo me sorprendió que mucha gente se empezara a ir si apenas estaba lo bueno, estábamos super animados cuando un mesero nos interrumpió

Mesero: disculpe señorita, le mandan esto

Iveth: Gracias pero no lo puedo aceptar

Mesero: son órdenes del patrón, la tiene que aceptar

Iveth: De cuál patrón? Dígale de mi parte que por lo menos venga y me la de el

Mesero: pero se la dejo, en un momento regreso con lo que me dijo

Iveth: gracias oiga

Continúe cantando pero en las vueltas que daba trataba de ver si alguien me miraba para más o menos darme una idea pero nada, no logré ver qué alguien me viera, seguí en mi rollo hasta que sentí que alguien tocó mi hombro y logré ver qué era el mesero de nuevo ahora con las típicas rosas de antro, pero no eran 1, eran más de 10

Mesero: Le mandan, ahora sí trae tarjeta

Iveth: muchas gracias

Me dispuse a leer la tarjeta y al momento llegaron las chicas del baño y no dudaron en bombardear de preguntas

Issabela: No mames de quién son?

Iveth: me las mandaron y una botella

Danna: a huevo, a ver la tarjeta

Iveth: déjenme leerla primero ahorita les digo jajaja

Issabela: ni madres leela en voz alta

Iveth: okey ahí va " Para la más chula del antro, para la otra voy y se las doy yo"

Danna: nomás? No hay nombre? Dirección? Apellido? Curp?

Iveth: jajajjajaja nadamas, no hay nada

Issabela: puta madre, quién será el que nos va a pagar las vacaciones en maza

El Deseo De Amar Para Siempre. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora