Este one shot participa en el reto semanal de #FortunaMusical de la página SasuSaku Éternic Moi.
"Nunca he sido un santo debo confesarlo ya, con honestidad. Fueron tantas horas tan solo y triste hasta que te ví, tu llenas mi vida, tu llenas mi alma. Por eso siempre quédate aquí. Solo déjate amar"
Lo había arruinado.
Desde el inicio sabía que involucrarme con esa humana me traería problemas, que ironía pensé, ahora esa realidad me daba un duro golpe en la cara.
No era del tipo que gritará, mi voz tenía ya un tono suficientemente amenazador cómo para asustar a alguien, aún así, no podía negar que lo que más quería en este momento era gritarle a todo pulmón: “ Idiota, acaso no viste el auto que venía hacia ti!”. Debía controlarme, la pelirosa aun se encontraba quieta en mis brazos y temblaba, ella también mantenía sus orbes verdes en mi mirada. Un grupo de personas empezaban a formar un círculo a nuestro alrededor viendo la escena: la parte delantera de un auto totalmente destruida, el conductor de este estaba atónito y sorprendido y los murmullos de la muchedumbre empezaron a ser más notables.
“ Es un héroe”, “ Salvó a la joven”, “ “¿Cómo lo hizo?”, “ Es tan guapo!”, “No tiene ningún rasguño”, “ Tiene peinado de cola de pato”. Sí, los humanos eran tan paganos y solo decían idioteces en momentos serios como este. Sentí algo cálido y conocido, la pequeña mano de la chica se había posado en mi mejilla y con el dorso me acariciaba suavemente cómo varias veces lo había hecho desde que nos conocimos. Debieron haber sido solo unos segundos para el resto del mundo, pero en nuestro pequeño alrededor pareció una eternidad antes de que ella murmurara con un tono diminuto y a punto de quebrarse: “ Gracias por haberme salvado otra vez”, ella ignoraba que esta ocasión no se asemejaba en nada a la situación pasada, era el momento en que mis acciones al fin tendrían consecuencias.
Sentí el aura gélida que Orochimaru transmitía y antes de alejarse él me dedicó su mirada tétrica símbolo de una amenaza tácita. El regresaría por ella, solo necesitaba encontrar el momento adecuado.
Todo se volvió de un tono negro en mi mente y el último pensamiento que pude mantener es que sí, yo había salvado a Sakura y al hacerlo me había condenado a mí mismo.
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-Estás seguro que puedes caminar?- la pelirosa trataba de igualar mi paso mientras me alejaba de aquel lugar, nubes grises se acumulaban en el cielo dando aviso de una gran tormenta. Maldición.
Después de perder el conocimiento desperté en la cama de un hospital, el sonido que me dio la bienvenida a la vida fue el llanto nada discreto y desconsolado de la culpable de mi desgracia. No tenía ninguna herida en mi cuerpo y la revisión del doctor fue rutinario, todo indicaba que podría irme pronto pero en cuanto el interrogatorio comenzó, eso se fue a la mierda.
Tu apellido?, Tu edad?, Tu dirección?, Algún familiar al que puedas contactar?- Me mantuve en silencio ante la postura severa del médico y la mirada curiosa de la pelirosa quien aún se mantenía en la habitación. Ni siquiera le había dicho mi nombre al doctor, me negué a que aquel desconocido supiera más de lo necesario, ya tenía suficientes problemas con los que lidiar y el principal de todos ellos era que ahora era un ser humano. Un maldito ser humano.Corrí lo más rápido que pude sabiendo exactamente a dónde ir, en algún punto de mi trayecto la pelirosa me perdió el paso y estuve agradecido, no quería cargar conmigo la evidencia viviente de lo que había hecho y solo podía rogar porque ella llegara con bien a su hogar. Me dolía la cabeza, mi corazón golpeaba con fuerza en mi pecho, mi respiración era agitada y el dolor en mis extremidades aumentaba con cada paso que daba. Si esto era sentirse vivo definitivamente apestaba.
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Sólo déjate amar
Fanfiction✧*。Sasuke cometió errores que lo llevaron al borde del abismo. Sabía que merecía aquel dolor y que lo que quedaba de su existencia pagaría con creces cada sufrimiento causado en el pasado. En aquel lugar lleno de penumbras y recuerdos, solo un dest...