Desde el inicio -Aonunete

Arco

Ya habían pasados varias semanas desde que Neteyam había vuelto, volvió a sus respectivas actividades y todos se aseguraban de que este bien

Ao'nung cada vez tomaba más responsabilidad, tenia nuevos tatuajes y nuevas expectativas, al igual que Tsireya, ambos serian los lideres del clan

Reya sería la Tsahík, llevaba bastante tiempo preparándose para ese papel, pero ya lo tenia cubierto, en si aquel cargo era sumamente importante, pero más lo era el de Olo'eyktan y ella lo sabía, por ello siempre le mostro apoyo a su hermano

El único que no tendría un papel importante sobre el clan sería el hermano menor de los lideres, el recién nacido, era bastante perecido a su padre, ese niño nació en medio de la tragedia, fue la luz de muchos y la nostalgia de otros

Ahora Ao'nung y Tsireya cuidaban de su hermano menor, la chica peinaba el escandaloso cabello de Ao'nung, mientras el chico jugaba con el hermano menor

-Tu cabello está muy enredado Ao'nung -se quejó Reya

-¿Perdón? No controlo mi cabello, no es que le pueda decir "¡Cabello, no te enredes! -dijo con sarcasmo y una sonrisa burlona

-Si claro -rodó los ojos divertida -¿Ya has pensado en como decirle a Neteyam lo que sientes?

-No... No tengo ni idea -suspiró mientras jugaba a chocar las manos con su hermanito de 8 meses

-¿Por qué no lo invitas a una cita?

-¿Así de la nada? No creo

-Se disimulado, así lo hizo Lo'Ak conmigo, ni siquiera me di cuenta de que era una cita hasta que me lo dijo -río

-Bueno... lo intentare -contestó con un suspiro -¿Tu que dices pequeño? -preguntó mirando a su hermano, quien comenzó a saltar y reír

-Que suertudo que este niñito -comentó Tsireya -Lo único que lo tiene que preocupar es no hacerse popo en su ropa

-Y en el futuro... será un Na'vi importante, sin tener que ser algún líder

-Que suertudo -dijeron al mismo tiempo causando que se rían

Tsireya termino de trenzar el cabello de su hermano, este le agradeció y se fue con su hermanito para nadar un poco

Se estaban divirtiendo, la risa del pequeño alegraba a Ao'nung, amaba compartir aquellos momentos con su hermanito, no pensaba que podría amar a alguien en tan solo saber de su existencia, hasta que le contaron acerca de su hermano

-¡Ao'nung! -alguien llamó desde lejos, llamando la atención de él mencionado

-Neteyam -saludó con una sonrisa

-Hola -se acercó -Y hola pequeño -saludó al menor causando que se ría

-¿Todo bien?

-Si, solo quería verte -le sonrió causando que el otro se ponga nervioso -Oye... ¿quieres ir a nadar más tarde?

-¿Más tarde? ¿Por qué no ahora?

-Pensaba que sería mejor en el atardecer, sería... más bonito

-Ah, entonces... si claro

-Genial -le sonrió moviendo la cola -Iré a buscarte más tarde

-Perfecto -le devolvió la sonrisa

-Me tengo que ir, nos vemos -se despidió -Adiós pequeño -le hizo unas suaves cosquillas al bebe, para después irse

-Nos vemos -se despidió Ao'nung con una sonrisa tierna