Que fue de ti

Dia 18 Que fue de ti

Mi pasión por la lectura me llevó hasta ella; la conocí en una librería, aún recuerdo mi sorpresa al verla interesada por obras de terror; ese día en cada una de sus manos sostenía un ejemplar de Drácula y Frankenstein, parecía indecisa; por su aspecto tierno y delicado juraría sería del tipo de obras de Jane Austen o Jojo Moyes; verla ahí en esa estantería me intrigo, quería conocerla.

-Disculpe señorita, no es mi intención molestarla y si me lo permite, me considero un ávido lector y bien podría recomendarle un excelente libro respecto al género que busca.

Mierda, fue la palabra que pasó por mi mente en cuanto volteo a verme con esos embriagadores ojos verdes y artículo:

-Muy amable caballero, también me considero una ávida lectora y en estos momentos prefiero deleitarme con la lectura de un clásico.

Así, sin más, me rechazo y no me dio pie a réplica, con lo cual ella me interesó aún más; aparte de mi madre y una que otra colega no había encontrado una mujer con la cual quisiera tener una conversación más larga, amena e interesante; no me daría por vencido tan fácilmente, no por nada dirigía un bufete de abogados.

-Ya que estamos con los clásicos, qué me dice de Hansel y Gretel; por fin capté su atención.

-No lo había considerado, pero es buena idea.

Si no tiene planes o algún inconveniente podríamos platicar sobre ese cuento de los hermanos Grimm, la obra original, no sus adaptaciones.

Ella me miró expectante, me sonrió y sin más reparos me indicó que conocía una excelente cafetería a la cual acudía con regularidad sobretodo en las noches de jazz en vivo; en secreto me reí conmigo mismo, aceptó mi invitación.

"Beso de Ángel ", así se llama la cafetería en la cual tuvimos más de una cita, donde cada día me enamoraba más de Sakura Haruno y no podía tenerla; la razón, un matrimonio ya de cuatro años; me había casado a los veinticinco años con Mina Sarutobi, tras una promesa hecha a su padre en su lecho de muerte; el padre de Mina era socio e intimo amigo de mi padre, en cuanto el señor Sarutobi enfermo mi familia se hizo cargo de sus cuidados y de Mina; Mina es una gran mujer, guapa, tierna, atenta; nunca creí en el amor, yo consideraba que lo mejor para un matrimonio era una convivencia simple y armoniosa, y así funcionamos durante cuatro años, hasta que el amor se vengó de mí y sí, terminé enamorado.

Fue un veintiocho de febrero, la pasión y el anhelo por tenerla por fin me segó; salimos de la cafetería y la llevé a su casa, cuando abrí la puerta para que bajara no pude contenerme tome su rostro y sin más la besé; para mi sorpresa ella correspondió mi beso el cual pasó de tierno a pasional, no fue hasta que tuvimos que separarnos para tomar aire qué nos miramos, y me quedé ahí perdido en su mirada.

-Sasuke, soy perfectamente consciente que estás casado, lo lamento yo.....

La callé con un beso, no tenía porqué disculparse el traidor era yo y si ya estaba condenado pues ardería en el infierno, lo sentí en su beso, había algo que nos conectaba y no quería dejarlo ahí, fui un cínico y la besé de nuevo le pregunté al oído que si quería seguir, se puso roja, me dio un tierno beso y me dijo que si, seria un caballero y no invadiria su espacio, fuimos a una cabaña a las afueras de la ciudad; la noche fue más qué perfecta hicimos el amor y nuestras almas se encontraron una y otra vez.

Así continuamos durante seis maravillosos meses, entre pláticas, jazz y una pasión descomunal que invadía nuestros cuerpos; yo pensaba divorciarme pues quería una vida con Sakura y pese a todo Mina no merecía lo que le estaba haciendo, sin embargó Sakura tenía otros planes; ese día estaba en mi despacho, había quedado con Sakura de vernos por la noche; se nos había dado por escribirnos cartas y ese día recibí una de su parte:

"Querido te veo en la cabaña, llego un poco tarde, Te Amo."

Ya en la cabaña se encontraba otra carta:

".. nunca me di la oportunidad de amar, de disfrutar, de sentir, te amo por despertar eso en mi y por lo inmensamente feliz que me hiciste, no puedo estar ya contigo, no porqué no te ame, al contrario te amo y necesito protegerte; si, mis libros favoritos son las novelas románticas, mi acercamiento con el género de terror fue para no temerle a la muerte; el día en qué nos conocimos me dieron los resultados médicos de cáncer de páncreas en fase terminal, con probabilidad de vida de un año; ya no hay nada que hacer, no me busques y por favor se feliz ..."

Cómo no la iba a buscar, pero como siempre fue más lista que yo en todo, me dijo que no tenía familia con vida, era editora en una revista y trabajaba vía remota; moví todos los recursos a mi alcance para encontrarla y nada; durante los siguientes meses caí en la desesperación y depresión, ya no por encontrarla sino por rogarle a dios que estuviese bien.

Al año de conocernos llegó una carta cuyo remitente era Sakura Haruno:

"...Mi nombre es Ino Yamanaka, soy la mejor amiga de Sakura, escribo esta carta para hacerle de su conocimiento que Sakura falleció y ya está descansando; me contó de usted y solo quiero agradecerle ya que la hizo inmensamente feliz, espero estas palabras puedan reconfortarlo y se quede tranquilo y sea feliz como ella quería que lo fuera..."

Puedan reconfortarlo dijo..., esa mujer estaba loca, estaba mal, muy mal; Sakura estaba muerta, mi Sakura había muerto; Mina se entero de todo y aún así permaneció a mi lado, ella estaba de acuerdo con el divorcio, cómo yo tampoco se había casado enamorada y deseaba iniciar una nueva vida. Se quedó conmigo y me apoyo hasta que estaba, dentro de lo que cabe, un poco mejor.

Hace ocho años de eso y aún vengo a esta cabaña, a recordarla... a ella, a mí Sakura.

Fin.